El procedimiento fue realizado por la policía

Clausuran dos cíber porque no bloqueaban las páginas porno

Las máquinas no tenían un filtro que evita ingresar a esos sitios, como lo dispone el Código de Faltas

Dos cíber de la zona sudoeste de Rosario fueron clausurados ayer tras comprobarse que sus computadoras no contaban con los filtros de acceso a páginas web con contenido pornográfico. La medida fue concretada en el marco de los operativos que llevan adelante periódicamente las unidades especiales de la policía para dar cumplimiento a las penalidades establecidas en el Código de Faltas de la provincia.

El procedimiento, que inició de oficio la sección Seguridad Personal de la Agrupación de Unidades Especiales, derivó en el cierre de los locales ubicados en Avellaneda 3441 y Roullión 3627. En el primer caso, además de no poseer el bloqueo informático, en el comercio tampoco contaban con la habilitación municipal para funcionar y su encargado quedó demorado en sede policial. En el segundo, las máquinas chequeadas fueron siete y ninguna contaba con el dispositivo de seguridad antiporno. Allí, una mujer de 27 años se constituyó en responsable del local y pasó algunos minutos en la comisaría, hasta que se le tomó declaración.

Si bien hasta ayer el Tribunal de Faltas en turno no había tomado conocimiento de los procedimientos, se esperaban para hoy los partes preventivos elaborados por la policía para instrumentar las medidas pertinentes.

No obstante la vigencia de la sanción, La Capital pudo comprobar ayer que el negocio ubicado sobre Avellaneda al 3400 estaba abierto y repleto de jóvenes chateando.

"Son procedimientos de rutina que se realizan para resguardar a los menores que asisten a esos espacios. Cuando no tienen los filtros de bloqueo de las páginas pornográficas, se debe proceder a clausurarlos", precisaron desde la sección Unidades Especiales de la URII de policía a la hora de dar precisiones sobre las procedimientos. "Podemos actuar de oficio, como en este caso, y luego dar parte a la Justicia de Faltas para que proceda", agregó la fuente.

El control sobre los locales de internet, cíber o cibercafés comenzó a mediados de enero de 2004 en cumplimiento de los artículos 80 bis y 80 ter del reformado Código de Faltas de la provincia que incorporó la ley 10.700. El primero de los artículos castiga a quienes no pongan filtros restrictivos de acceso a portales con contenidos pornográficos, y el segundo penaliza a quienes lo desactivan. Con la norma en la mano, la policía tiene el patrimonio de allanar los establecimientos y clausurarlos si se detecta la contravención de la norma.

Si se comprueba la transgresión, la ley castiga al titular o responsable del comercio que no instale el cepo informático con arresto de hasta 20 días o multa de hasta seis unidades jus (cada una tiene un valor de 150 pesos). Además, los jueces de faltas también pueden disponer la clausura del comercio donde se hubiera cometido la infracción por un término de hasta 30 días.

Si bien el local de Avellaneda al 3400 fue clausurado, ayer por la tarde estaba abierto-