Los "errores" del fútbol

La sociedad cada día incorpora elementos que van legitimando los hechos, las verdades, las cosas que pasan al hombre en sociedad con el fin de superar errores y desigualdades. No siempre es así, pero a eso se tiende. Pero el fútbol, su dirigencia, se resiste a incorporar los elementos que van dando esa veracidad a los hechos y persisten en mantener los grises de la impunidad y la injusticia. Ello se verifica a diario con los ejemplos que se pueden ver. ¿Cúantos partidos perdidos, ganados o empatados injustamente gracias al "error" de los árbitros? ¿Cúanto daño, inconsciente o conscientemente se realiza con características de impunidad que sigue generando odios y violencia? ¿Hasta dónde podemos decir que son errores y no maniobras especulativas con objetivos preestablecidos? El error humano es tal tanto al cobrar mal pero honestamente un penal o un gol, como a cobrarlo mal para que otro se favorezca. Aunque en esto último hay una premeditación que convierte al error en otra cosa. Uno es mucho más grave que el otro, y ambos imposibles de probar como culpa, premeditación o inocencia. El error es la calificación de un acto al cual se prejuzga inocente, por eso es más fácil justificar el acto humano fallido. ¿Pero es así la cosa ? Hay varios ejemplos a nivel mundial que ponen en duda ese concepto, y muchos miles que generan sospecha.Tanto el error como la culpa premeditada tienen la misma severidad en los daños y consecuencias que acarrea. Por lo tanto no puede ser lo mismo uno que otro diagnóstico. Se debe achicar todo lo que se pueda el margen de error para evitar un daño y una injusticia que ya tipifica como delito si proviene de una premeditación. También se debe achicar la maniobra con culpa para que esos daños no sean especulativamente manejados. Por eso frente a los goles mal anulados por los jueces y ayudantes en un partido de fútbol se debe utilizar la tecnología antes de anular un gol y poderlo ver por los equipos de imágenes colocados ex profeso para ello. Todo lo cual, obviamente, se debe legislar. Si un gol se legitima, pero en realidad estuvo mal dado, que es el caso inverso, cualquiera de los jueces y colaboradores podrá pedir isofacto su verificación de existir la duda. O los jueces que estén siguiendo las acciones por los equipos de TV podrán advertir el error instantáneamente y operar en consecuencia. No son demasiados los casos como para decir que se hace el trámite engorroso, pero sí es demasiado el daño que surge de esos "errores". En muchos casos se puede decir que hasta esos errores costaron campeonatos, y a otros se lo regalaron. O tal vez el descenso. Es demasiada impunidad para seguir con este silencio.

Carlos Morcino, DNI 6.042.85