Diego y Lifschitz dieron el presente

Como era de esperar, Diego Maradona dijo presente en Parque Roca. Tampoco faltaron otros reconocidos como Carlos Bianchi, Ricardo Darín, Valeria Mazza, José Luis Clerc y Martín Palermo. Y hasta estuvo el intendente de Rosario, Miguel Lifschitz, sentado muy cerca del Diez y contagiándose del clima festivo.

Diego, vestido con su inconfundible camiseta de Argentina, fue acompañado por Claudia y siguió de cerca los dos partidos de ayer. El de Nalbandian-Philippoussis lo vivió con una llamativa calma, pero después con Acasuso-Hewitt volvió a ser el Diego de siempre.

Cada vez que el público hacía sentir su aliento estaba él a la cabeza, revoleando la remera hacia los cuatro costados y, por qué no, hasta insultando a Lleyton Hewitt cada vez que el australiano iba a jugar debajo suyo. Es más, en un momento tuvo un cruce verbal, a la distancia, con los pocos simpatizantes visitantes que, como no podía ser de otra forma, fue festejado por todo el estadio.

"El (por Hewitt) no conocía Argentina. Creía que vivíamos con arcos y flechas, que acá no hay seguridad. Se dio cuenta que somos un país civilizado y lo único que queremos es ganarle al tenis, nada más. Nadie le va a hacer nada", declaró Diego, antes de agregar: "Hay que arruinarlo, estropearlo, ajusticiarlo en la cancha".

El intendente Lifschitz, junto a sus dos hijos mayores, no faltó a la cita, invitado especialmente por el capitán del equipo argentino, Alberto Mancini.

El intendente en las tribunas junto a Diego y Claudia.