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"Llevar adelante este trabajo fue como estar embarazada 18 meses"

Christina Aguilera le rinde culto a los clásicos del soul y del jazz en su álbum doble "Back to Basics"

Cuatro años después de "Stripped" y luego de un año y medio de grabaciones, el nuevo álbum de Christina Aguilera invadió las bateas de música pop de todas las disquerías del mundo. "Back to Basics", que podría traducirse como "de vuelta a las raíces". Y algo parece haber de ello en este trabajo, en el que la artista dice haber volcado las influencias de la música que lleva escuchando desde su infancia.

"Back to Basics" es un disco doble y muestra la evolución de una artista, tanto personal como musical, tras haber colaborado durante estos años con muchos músicos y artistas, que en ocasiones se alejan de lo que es pop 100 por ciento, y refleja la música que la inspiró en el pasado. Así, la cantante plasma sus influencias del jazz, el R&B y el pop, pero adaptados a la sensibilidad del siglo XXI.

El primer single es "Ain't No Other Man", producido por DJ Premier y Charles Roane. "Se trata de una canción sexy y animada", dice Christina Aguilera, y luego añade. "«Back To Basics» es un álbum conceptual que persigue una visión audaz y marcada. Las bases están inspiradas en Billie Holiday, Otis Redding, Etta James, Ella Fitzgerald? Lo que solía llamar mi música preferida cuando era niña".

El disco incluye una orquesta, coros, un cuarteto de cuerdas, toques de jazz y otras técnicas que proporcionan un sonido antiguo y muy sensible. Temas como "I Got Trouble", que lleva rasgos de blues; "Candy Man" que recuerda a grupos de chicas de los años 30 y 40; en "Save Me From Myself", Aguilera se desnuda emocionalmente y se la dedica a su marido; "Thank You", está dedicada a sus fans, y "Nasty Naughty Boy" tiene un toque a los años 20.

"Hay muchas cosas que no se parecen a nada que la gente haya escuchado antes de mí", advierte la estrella sobre su próximo disco. La autora de "Dirrty" comparó el proceso de elaboración del nuevo disco con "estar embarazada durante 18 meses".

El disco 1 ofrece 13 canciones de marcado carácter electrónico y contemporáneo en las que, al lado de Christina Aguilera, aparecen compositores como Allen Toussaint, Steve Winwood, Gladys Knight, Kara DioGuardi, Don Costa o Mark Ronson, entre muchos otros. La nómina de productores tampoco es corta, empezando por DJ Premier para continuar con Rich Harrison, Kwame, Mark Ronson, Big Tank & Q, Charles Martin Roane y Tony Reyes, siempre con la colaboración de Christina Aguilera.

En el disco 2 es Linda Perry quien toma el mando junto a Christina Aguilera. Juntas componen prácticamente la totalidad de las canciones de este segundo álbum, producido íntegramente por Perry, que además se encarga del piano, órgano, bajo, mellotron, guitarra y arreglos de cuerda. Rompe con lo contemporáneo y juega con una orquesta, coros a los gospel, cuartetos de cuerdas, toques de jazz y rasgos de blues. El resultado son temas que recuerdan al Manhattan de los años 20 o a los grupos musicales de chicas de los 30 y 40.

En su nuevo disco, Aguilera quiso tributar a la música que escuchaba de chica.