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 domingo, 13 de agosto de 2006  
No es una mancha. El cura del pueblo cree que no hay fraude. Pidió cautela y ofició misa ante 200 personas
La imagen de la Virgen en una pared causa conmoción en Diego de Alvear
Tiene colores celeste y rosado, los mismos que la de San Nicolás. Dicen que "es una señal de Dios"

Gregorio Sogno / La Capital

Diego de Alvear.- Una imagen en una pared cuyos contornos se asemejan a la Virgen de San Nicolás despertó un hondo sentimiento religioso entre unos 200 vecinos del barrio Fonavi de esta localidad del departamento General López.

El 24 de Julio pasado, a las 13, Ana se encontraba en su vivienda preparada para pintar su casa, pero al correr una estantería para limpiar el lugar vio en la pared los contornos de una imagen que consideró semejante a la Virgen. Impresionada por la visión llamó rápidamente a su nieto y algunos vecinos diciendo que tenía miedo que fuera una alucinación suya.

Una silueta como en negativo con sus bordes que parecen ser una imagen que observa a un niño en sus brazos y éste mira hacia el frente, pudo ser captada en fotografías. Ana contó que "yo no quería hacer mucho comentario sobre esto hasta que viniera el padre Víctor Favero".

El sacerdote es el párroco de las iglesias San Gregorio (de la localidad homónima) y de la del Carmen (de Diego de Alvear). Consultado sobre el caso, el clérigo expresó que "fui informado de la aparición de una silueta que no se puede decir que es una mancha de humedad, en una vivienda donde una señora muy creyente pero que no es practicante veía este fenómeno en el que la silueta aparenta tener una forma que se parece a la Virgen de San Nicolás".

"¿Qué significa eso?", se interrogó el cura. "Yo digo que es algo que hay que analizar, medir y observar. Hay que tener prudencia, el primer signo si es una señal de Dios será la conversión de la gente", apuntó.

Pero poco días después, el 28 de julio pasado, a las 23.40, en la casa de Ana y frente a varios testigos se registró otro hecho impactante, que la señora contó así: "Esa noche, vimos que el manto se iluminaba de color celeste, de abajo hacia arriba. Lo último que terminó de colorearse fue la imagen del niño. Todos quedamos paralizados, fue algo estremecedor, mi nieta Milena me abrazó y me dijo: Tengo miedo abuela. Yo le dije, no tengas miedo porque estamos protegidas".

El hecho generó gran conmoción no sólo en el pueblo sino en localidades cercanas y motivó numerosas visitas al lugar, al punto que los vecinos para proteger a Ana -quien dice que ya no puede comer ni dormir- le han puesto horario a quienes se llegan hasta el lugar.

Pero en días posteriores el estupor por el fenómeno aumentó cuando al celeste del manto que se veía se le agregó un color rosado, el mismo que también tiene la imagen de la Virgen de San Nicolás.

Ante este nuevo episodio, el padre Víctor expresó que "hay que tomar esto con gran cautela, hay que esperar, porque el tiempo es el que va a definir todo. Yo no creo que sea un fraude porque la gente de acá es muy sencilla y no busca ningún tipo de rédito".

En su domicilio, la mujer atiende a todos y explica que "no soy practicante de ir a la iglesia. Es más, nunca fui a ver la Virgen de San Nicolás, pero sí soy devota de la Virgen María Rosa Mística a quien me encomiendo, rezo, prendo velas. Sin embargo en mi vida he sufrido muchas cosas, como problemas de salud de mi yerno, con mi mamá, y en lo personal también".

Ana le manifestó a sus amigas que hace unos días, mientras dormía, una figura como una "estatua" de la Virgen de San Nicolás se le apareció en un sueño y le dijo: " tengo sed". Muchos opinan que este hecho deriva de la conmoción interior que está atravesando la mujer y los habitantes de Diego de Alvear, aunque hay quienes lo consideran como una nueva manifestación de este fenómeno que comenzó hace dieciocho días.

Sin embargo, el padre Víctor aún no piensa informar al obispo de la diócesis de Venado Tuerto, monseñor Gustavo Help, de la cual depende, "porque quiero que pase el tiempo y que esto se consolide. No vamos a romper una pared y llevarla a la iglesia (que está cruzando apenas la calle). Evaluado en su momento, le pediré por carta que envíe una comisión para que estudie el caso".


Una multitud
Hace pocos días, más de 200 personas se reunieron frente a la casa de Ana, y con la presencia del padre Víctor rezaron el Santo Rosario. Luego el clérigo pidió oraciones para esta presencia para que, de seguir manifestándose, "traiga paz, salud y trabajo para todos los presentes", tras lo cual invitó a todos a llegarse hasta la parroquia a oficiar la Santa Misa.
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La silueta se descubrió sobre una pared cuando corrieron una estantería.

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