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jueves,
27 de
julio de
2006 |
Polémica por un fallo que
impide abortar a una joven
discapacitada que fue violada
Funcionarios nacionales y bonaerenses, abogados, ex jueces y especialistas en sanidad y género rechazaron un polémico fallo que denegó un pedido de aborto solicitado por una mujer cuya hija discapacitada está embarazada debido a una violación, un caso que analiza la procuradora general de la Suprema Corte bonaerense, quien se expedirá al respecto en los próximos días.
El gobernador de Buenos Aires, Felipe Solá, dijo ayer durante un acto en Ensenada que la joven tiene pleno derecho y ojalá la Suprema Corte le dé la razón", afirmó en referencia al expediente que está analizando la procuradora María del Carmen Falbo y que también revisan los miembros del máximo tribunal.
Por su parte, el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, consideró que "el fallo le agrega tragedia a lo que ya es una tragedia".
El permiso para abortar fue solicitado a un tribunal por la madre de una joven de 19 años que padece una incapacidad mental y quedó embarazada luego de una violación.
La Sala II de la Cámara Primera de Apelaciones en lo Civil y Comercial de La Plata confirmó anteayer la sentencia de primera instancia, en la que la jueza de menores platense Inés Siro había denegado el pedido para que se le practique el aborto a la joven, que actualmente tiene cuatro meses de embarazo. La jueza fundó el polémico fallo en la "protección constitucional del derecho a la vida".
En tanto, la abogada Nina Brugo, presidenta de la Comisión de la Mujer de la Asociación de Abogados de Buenos Aires e integrante de la comisión directiva de la Fundación Agenda de las Mujeres, señaló que en este caso, la interrupción del embarazo no necesitaba de permiso judicial.
"La jueza consideró que en este caso intervinieron cuestiones religiosas y de índole ideológica", advirtió Brugo y dijo que si la magistrada no podía aplicar el Código Penal sin consideraciones personales, debió excusarse.
Otra lectura
Sobre ese punto disintió la ex jueza de menores, Irma Lima, para quien la lectura jurídica del fallo sí es correcta. "Lo que acá se plantea es la justicia del fallo -señaló. No en el aborto general, sino en estos casos particulares donde el impedimento (de interrumpir un embarazo) puede consagrar una injusticia, como el caso de esta chica discapacitada y violada".
La coordinadora de la Asociación Católica por el Derecho a Decidir, Martha Alanis, opinó de lleno sobre la cuestión religiosa: "Soy católica practicante y nunca me enseñaron que a una niña discapacitada se la puede violar cristianamente y se la puede obligar a tener a ese niño no deseado, también cristianamente", afirmó.
"El caso de esta muchacha está dentro de lo que permite el Código Penal", destacó y dijo que el médico debió auxiliarla en el momento y que si se cometió el error de no hacerlo, "la Justicia tendría que haber actuado rápidamente". (Télam)
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