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 miércoles, 19 de julio de 2006  
Diputado lamentó excarcelación de Bussi

Tucumán- El diputado nacional justicialista Gerónimo Vargas Aignasse, hijo del senador Guillermo Vargas Aignasse, quien desapareció en 1976, aseguró hoy que “fue una noticia desagradable” la excarcelación ordenada a favor del

represor Antonio Bussi, en la causa por el secuestro de su padre.

“Fue una noticia desagradable para unas 600 familias tucumanas que fueron afectadas por el accionar de Bussi y de Luciano Benjamín Menéndez durante la dictadura militar, que es de público y notorio”, aseveró a la prensa el parlamentario.

Vargas Aignasse expresó que “lamentablemente la Justicia nacional va a contramano de lo que sucede en el mundo, donde los derechos humanos están protegidos, y donde se condena con dureza a quienes los violaron en forma masiva”.

La referencia del legislador es a la decisión de la sala IV de la Cámara Nacional de Casación Penal que dispuso la excarcelación de Bussi y de Menéndez, precisamente, en la causa en la que se investiga el secuestro y desaparición de Guillermo Vargas Aignasse.

Los vocales del tribunal nacional aseguraron que, por su edad (80 años) y por su salud, la eventual puesta en libertad de Bussi no ponía en peligro la investigación penal en curso contra el militar (r), que entre 1976 y 1977 fue titular de la V Brigada de Infantería.

Pese a la decisión judicial, Bussi y Menéndez no fueron puestos en libertad, porque son investigados por violaciones a los derechos humanos en numerosas causas, en 11 de las cuales están procesados y con prisión preventiva.

Por su parte, el abogado Luis José Bussi, hijo del militar, replicó a Vargas Aignasse, al señalar: “Lo puedo comprender en su dolor, por haber perdido a un ser querido, pero no puedo aceptar su sed de venganza, sobre todo contra quienes combatieron a la subversión en los montes tucumanos por orden de un gobierno constitucional del mismo signo político que Vargas Aignasse”.

Por orden del juez federal Jorge Parache, Bussi fue detenido en octubre de 2003 y en noviembre de ese año fue trasladado a Buenos Aires bajo arresto domiciliario por la desaparición de Vargas Aignasse, ocurrida en marzo de 1976.

El 16 de marzo, en un avión sanitario Bussi fue trasladado a la capital tucumana, donde también se encuentra detenido Menéndez, quien durante la dictadura encabezó el III Cuerpo de Ejército (con asiento en Córdoba), del que dependía la unidad militar de Tucumán.

El ex gobernador Bussi se encuentra alojado en los ex Arsenales Miguel de Azcuénaga, ubicado en las afueras de la capital, pero hace un mes el fiscal federal Emilio Ferrer requirió que Bussi sea trasladado al penal de Villa Urquiza, pedido sobre el que aún no se expidió el juez Parache.

En cambio, la defensa insiste en que Bussi debe ser trasladado a Buenos Aires para poder ser atendido por sus médicos de cabecera, pero el perito de la Cámara Federal de Apelaciones, Raúl Asial, confirmó que médicos tucumanos pueden controlarlo al militar (r). (Télam)
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