ANALISIS

El "no" del Lole sacude al peronismo

El único "clamor" posible deberá venir de la Rosada. Estado de asamblea en el PJ, que pospuso un debate clave

Mauricio Maronna / La Capital

Los dichos de Carlos Reutemann publicados por La Capital en los que descartaba "absolutamente" la posibilidad de presentarse para un tercer mandato a la Gobernación generaron un tsunami político en Santa Fe. "Habrá que volver a empezar", dijo, resignado, un ex diputado nacional que venía vislumbrando el epílogo de la novela y que, ahora, imagina a Hermes Binner restregándose las manos.

Una vez superado el duelo, la conducción del justicialismo se propuso realizar una reunión de la mesa provincial para -primero- intentar hacer catarsis y -luego- bosquejar algún camino que permita volver a ponerse de pie.

"Ahí va a arder Troya, al menos es lo que pienso yo. No me voy a callar nada. ¿Quiénes son los que no respaldan al Lole? ¿Dónde están? Yo sé bien quiénes son y dónde están, y lo voy a decir en la reunión", bramó un legislador provincial antiobeidista vinculado a los gremios de la capital.

La novedad de ese encuentro es que varios dirigentes que se encuentran de vacaciones fuera de la provincia pidieron que el cónclave se posponga para el viernes 28 cuando, originariamente, se había programado para pasado mañana.

"Queremos que sea una reunión multitudinaria, que sirva para hacer catarsis y que nadie se quede sin decir lo que piensa, por lo que le dimos curso a ese pedido y postergamos una semana ese debate", dijeron ayer desde la conducción del peronismo.

Pese a la contundencia de las afirmaciones de Reutemann, no son pocos los que creen que la historia puede tener un final distinto si, una vez conocidas las encuestas que encargará el partido, Binner mantiene las diferencias actuales con eventuales competidores. Esos mismos son los que vuelven a la teoría del "operativo clamor", algo que también fue subestimado por el senador nacional.

Sin ley de lemas, el partido de gobierno se apresta a elegir su candidato a gobernador desandando un camino en desuso desde el 91: las internas. Una vez que Rafael Bielsa decida su futuro, las voluntades podrían inclinarse entre el ex canciller y Agustín Rossi. Aunque en el escenario hacen rodar otros nombres, como el del intendente de Rafaela, Omar Perotti.

¿Qué debería pasar para que Reutemann cambie de opinión? "Tendría que haber un cambio de escenario muy fuerte", fueron las palabras del Lole. Traducido, no significa otra cosa que un explícito respaldo público del presidente Néstor Kirchner (con quien el santafesino mantiene una relación formal) y un cambio de posición pública del gobernador Jorge Obeid, a quien su antecesor lo observa más proclive a cuestionarle algunas decisiones que a reivindicar otras.

"El presidente conoce perfectamente que sin Reutemann en la cancha será muy difícil derrotar a Binner y, de hecho, le pidió que sea candidato. El problema es que hay algunos muchachos cercanos al Flaco (por el jefe del Estado) que se le van de las manos", dice un ex ministro K. El Lole, como cualquiera que esté al tanto de la escasa voluntad delegativa del santacruceño, sabe que sin su consentimiento no se prende ni se apaga ninguna luz de Balcarce 50.

En ese contexto, hay que volver a una frase de Reutemann que vale más que cien subterfugios: "Al perro de uno, si se lo quiere, hay que pasarle una mano por el lomo".

Por eso, la pelota con la leyenda "Reutemann gobernador" pasó al campo de la Presidencia de la Nación y cualquier otra especulación traerá, palabras más, palabras menos, la misma respuesta del hombre de los 800 mil votos. Como también el run run de su participación en una hipotética fórmula presidencial, algo que, hoy por hoy, solamente serpentea en la mente de unos pocos ultrarreutemistas.

"Nadie anuncia que no será candidato un año y medio antes de las elecciones", han dicho quienes creen que el Lole guarda una última definición. Por ahí empezó la respuesta del santafesino al pedido de Kirchner para que se ponga el ropaje de campaña: "Vayan pensando en otra alternativa, miren para otro lado. Tienen tiempo, faltan casi dos años".

Le faltó mascullar una cita que lleva su copyright: "El que avisa no es traidor". No hay otro clamor posible que el que pueda llegar de la Rosada.

Sólo un fuerte respaldo del presidente hará que Reutenamm replantee la decisión.