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miércoles,
19 de
julio de
2006 |
López Obrador pierde más votos en recuentos parciales
Ciudad de México. - El centroizquierdista Andrés Manuel López Obrador perdió más votos que el oficialista Felipe Calderón en las 2.870 urnas que se abrieron para revisar los votos de los comicios del 2 de julio, dijo ayer un funcionario electoral mexicano. Mientras, un grupo de partidarios de López Obrador increpó a Calderón y hasta golpeó su camioneta, reclamando el recuento voto a voto.
De acuerdo al consejero electoral Rodrigo Morales, al verificar durante el conteo oficial si eran correctas las cifras asentadas en las actas de esas mesas de votación, López Obrador perdió 12.000 votos, mientras que a Calderón se le quitaron 10.000.
López Obrador exige que se vuelvan a contar los 42 millones de boletas de los comicios presidenciales, porque considera fraudulento el triunfo de Calderón por 0,58 punto porcentual, equivalente a unos 244.000 votos.
Según afirma el ex alcalde de Ciudad de México, un nuevo conteo en las 130.500 casillas demostraría que él ganó en realidad las elecciones. Hasta ahora sólo se reabrieron 2.870 urnas como parte del conteo oficial del 5 y 6 de julio. Esta reapertura se hizo en los casos específicos que establece la ley, y a pedido de los partidos políticos, por inconsistencias en las actas o errores aritméticos.
El Instituto Federal Electoral (IFE) señaló que en el 95 por ciento de los casos hubo que cambiar números en las actas al revisar otra vez las boletas. Sin embargo, indicó que las modificaciones no fueron determinantes en el resultado final, porque hubo votos mal contabilizados para todos los partidos políticos.
Para López Obrador existen errores en el 60 por ciento de las actas y 1,5 millón de votos sin sustento, que podrían otorgarle a él la victoria. El Tribunal Electoral tendrá que resolver las impugnaciones del centroizquierdista antes del 31 de agosto, para proclamar un ganador en los siguientes seis días.
Entretanto, dos días después de que López Obrador llamara a iniciar una resistencia civil pacífica para exigir el recuento de la votación, un pequeño grupo de sus partidarios increpó ayer a Calderón, e incluso algunos golpearon su camioneta, cuando dejaba un acto con sindicalistas en el centro de la capital.
"¡Voto por voto!, ¡casilla por casilla!", le gritaron no más de 10 personas que ya esperaban al conservador, y al menos dos de ellos golpearon con puños y patadas su auto. López Obrador rechazó condenar la agresión, y dijo que fue una reacción ante un "agravio mayor" contra la democracia.
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