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 sábado, 08 de julio de 2006  
Encausan al detenido por el crimen de la ferretera
Es un mecánico dental, acusado de disparar contra la mujer hace 18 días en Santa Fe. El se declara inocente

Santa Fe.— El juez de Instrucción Diego de la Torre procesó por homicidio agravado por el uso de arma de fuego al mecánico dental Marcelo Gutiérrez, que está acusado de haber asesinado a Marta Guadalupe Rotondodel barrio Roma de la capital provincial.

  A pesar de la imputación, Gutiérrez negó la autoría del crimen ante el magistrado interviniente. Era hasta ayer el único sospechoso detenido en la estación de bomberos de Santa Fe por el crimen de Rotondo, dueña de una tradicional ferretería situada en la esquina de La Rioja y San José.

  El cadáver de la comerciante fue encontrado la noche del martes 20 de junio en el interior del baño de su casa, a pocos metros del local comercial. Según las pericias forenses, la mujer presentaba dos disparos de escopeta en el cuello y en el tórax.

  El dato más sustancial hallado por los investigadores en la misma escena del crimen fue una sugestiva anotación que la comerciante había escrito de puño y letra que incriminaba a Gutiérrez como sospechoso, al parecer, por una deuda económica.

  Con ese dato clave, agentes de la seccional 1ª y de la División Homicidios de la Unidad Regional I se dirigieron al domicilio de Marcelo Gutiérrez, un reconocido mecánico dental de 63 años, que habría mantenido una relación conflictiva con la víctima en los últimos tiempos, y lo detuvieron.

  En tanto, aunque no se han abandonado otras pistas de investigación, según supo este diario, el magistrado consideró que los indicios recogidos determinarían que existe semiplena prueba de la eventual autoría por parte del profesional.

  La falta de una coartada, las evasivas en los interrogatorios, la nota que dejó la comerciante y una prueba de parafina con resultado positivo —fue relativizada por los abogados defensores de Gutiérrez ya que su cliente, según dijeron, estaba acostumbrado a manipular productos químicos por su profesión— parecen ser los indicios incriminatorios tenidos en cuenta por el juez De la Torre.
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