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sábado,
24 de
junio de
2006 |
Blancos frágiles
El ataque que sufrió Juan Cuatrocasas pasó a engrosar la larga lista de hechos que tienen como víctimas a personas de avanzada edad, muchos de ellos asesinados por los maleantes que ingresan a sus viviendas con fines de robo. A lo largo de 2005, se produjeron en distintos puntos de la ciudad una decena de crímenes, algunos con similares características al ataque perpetrado anteayer.
Así, habrá que recordar los siguientes homicidios: Carmelo Casas, de 82 años, asesinado en Washington al 1200 el 6 de marzo de 2005; Nicolás Rezkalah, de 80, en la localidad de Pérez el día 22 de ese mismo mes; Teresa Bressán de Collado, estrangulada en su casa de José C. Paz al 1400 el 9 de junio del año pasado; Angel Ramón Vega, de 72 años, golpeado hasta morir en la cochera de Berutti al 3100 en la que trabajaba como sereno; Juan Quercias, maniatado y asfixiado en su casa de pasaje Las Heras al 5000; Miguel Martino y su esposa María Rosa Sánchez, apuñalados en su vivienda de Luzuriaga al 2600; Nelly Viola, de 72 años, ultimada de un golpe en la cabeza en su casa de José C. Paz al 2400 el 27 de julio; y Oscar Martín, asesinado en su vivienda de San Lorenzo al 4000 en octubre de 2005.
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