Feliz día. Padres que hasta se animan a pedir la tenencia

Mucho más comprometidos con sus hijos

Se evidencia una creciente buena relación entre los chicos y los papás a pesar de que aumentan los divorcios

Claudio González / La Capital

Desde hace unos años a esta parte son cada vez más los papás que asumen un rol protagónico en la crianza de sus hijos. Y esa función desarrollada en el seno familiar se extiende cuando se producen rupturas familiares. A tal punto que, a pesar de la frustración matrimonial, muchos reorganizan su vida personal y dedican largos e intensos momentos junto a los hijos. Incluso hay hombres que luchan por una tutela compartida y algunos hasta se animan a pedir la tenencia. Ese es el caso de Diego Dolce, quien ya se acostumbró a la dedicación completa de sus tres hijo (ver página 12). Tanto jueces, como abogados y especialistas en derecho de familia coinciden en que esta tendencia creció, derribando algunos tabúes derivados de múltiples factores sociales.

A diario se palpa en la calles de Rosario que muchas cosas han cambiado. Ya no llama la atención ver papás con mochilas de los Power Rangers, el Hombre Araña o Barbie arrugando el hombro de su saco, o aquellos que simplemente llevan a los chicos en bicicleta para acompañarlos al colegio o al jardín de infantes. Ni hablar de los cochecitos de bebés cargados con mercadería en el supermercado, de los padres solos en los areneros los fines de semana o disfrutando un show de Barney en el teatro, son sólo algunos ejemplos.

Y puertas adentro, se los ve preparando mamaderas, cambiando pañales o dando la comida a los bebés. Estos nuevos papás abandonaron antiguas estructuras familiares para acomodarse a la dinámica actual y se comprometen con cariño para vivir de cerca cada transformación de sus herederos.

Si bien siempre son las mamás quienes piden convivir con los hijos cuando se inician los procesos de divorcio (por ley el niño debe permanecer hasta los cinco años con la madre, salvo casos excepcionales), los padres de esta época no escapan a las obligaciones que presentan el cuidado de un menor: educación, alimentación, salud y recreación son premisas que algunos hombres cumplen con amor y esmero, a veces en soledad y otras en el marco de una nueva familia.

Los permanentes cambios que impone la sociedad actual y los roles que asume la mujeres en procura de su inserción laboral, permitieron que el hombre repensara su función de papá, y establezca una comunicación especial con sus herederos en un marco afectivo que intensifica positivamente el vinculo, sin desmerecer la figura materna, que sigue cumpliendo un rol único.

"Más que en los papeles, aparecen mayor cantidad de acuerdos donde la mamá tiene la tenencia, y en los hechos a veces pasan tres o cuatro días con los papás. Los hombres siguen dándole ese atributo de custodia a la madre, pero en la realidad la tenencia termina siendo compartida", opina el juez Raúl Tierra, del Tribunal Colegiado de Familia de la 3ª nominación.


Cambio mental
El magistrado acepta que hay un cambio de mentalidad en la redefinición de los roles. "Hay que comprender cabalmente los distintos tipos de vínculos que los seres humanos van creando. En este caso el de padre e hijo, que no tiene nada que ver con la relación de esposos. Hay excelentes parejas de las que resultan malos padres y hombres que no pueden convivir más con su mujer pero son excelentes padres. Hablo de la representación. Ese es el gran cambio de mentalidad, las generaciones más jóvenes incluyen en ellas como prioridad a los hijos", resume Tierra.

Ana María Carreras de Trujillo, del Tribunal Colegiado de Familia Nº4, coincide con su colega. "En términos generales se advierte mayor compromiso de los papás. Si bien los casos que llegan al tribunal son los más complejos porque nadie quiere ceder terreno, cuando esto se supera también se refleja en la relación parental, y ya no se tiene en cuenta el calendario o el reloj para guiar los horarios o días de visitas", explica la funcionaria.

"Años atrás no veíamos tantos papás empujando cochecitos de bebés, esa es una realidad que nos ofrece la calle y en buena hora que así sea. La irrupción de las mujeres en el mercado laboral obligó a las parejas a dividir tareas que culturalmente antes estaban asignadas a la mujer", expresa Carreras de Trujillo.

En el mismo Tribunal, la doctora Lidia Bustamante destaca otros aspectos. "Es saludable que los padres luego del divorcio acepten acudir a terapia psicológica para superar algunos problemas. Esto los ayuda a comprender el nivel de responsabilidad que asumen con sus hijos luego de la ruptura", finaliza.

Diego abraza a sus hijos.