PAVON AL 5100

Detienen a un barrabrava de Central con armas y cocaína

Un barrabrava canalla fue apresado ayer por agentes de la Brigada de Drogas Peligrosas de la provincia en un allanamiento realizado en una vivienda de la zona sur de Rosario. En el procedimiento se secuestró un cuarto kilo de cocaína, dos armas de fuego, proyectiles y elementos para estirar y empaquetar la droga además de unos 2 mil pesos en moneda nacional y dólares.

El operativo se realizó en una vivienda de Pavón al 5100 (Ayacucho a la misma altura), a unas cuatro cuadras de la seccional 11ª, a partir de una orden de allanamiento emitida por el juez federal Germán Sutter Schneider. Allí vive Carlos G., de 36 años y "una veintena de antecedentes penales por delitos contra las personas, contra la propiedad y por resistencia a la autoridad", según dijeron los pesquisas de la brigada.

Los policías llegaron hasta allí mediante "tareas de inteligencia hechas en el entorno de la barra brava de Rosario Central", dijo el vocero, quien identificó al detenido como "un hombre muy allegado a Paquito Ferreyra o Paco Mono", líder de uno de los sectores de la barra del club de Arroyito.

Según las fuentes, al ingresar a la vivienda, "sobre la mesa del living, había un rallador con el cual el tipo estaba moliendo una piedra compacta de cocaína de muy buena calidad". Sobre la misma mesa fueron halladas "algunas sustancias vegetales y químicas utilizadas para el estiramiento de la droga".

Tras el hallazgo, los policías requisaron la vivienda y, a pesar de que no hallaron más droga, sí secuestraron "dos revólveres, calibres 22 y 32, y unos 50 proyectiles. También había un mortero para picar marihuana, bolsitas de nailon para empaquetar las bochitas, 2 mil pesos en billetes de baja nominación y unos 100 dólares en billetes chicos".

Según el vocero, Carlos G. no se resistió al arresto al verse sorprendido por los policías y quedó detenido en la Brigada de Drogas, de Dorrego al 300, a disposición del juez Sutter Schneider.

En tanto, sobre el valor de la droga secuestrada, el policía aseguró que "la droga secuestrada puede estirarse hasta duplicar su peso" para después ser fraccionada en bochitas de unos 3 gramos que se comercializan a unos 40 pesos". De esa manera, el pesquisa calculó que puesta en la calle, la cocaína secuestrada valdría unos 5 mil pesos.