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domingo,
14 de
mayo de
2006 |
La última del Clausura
Central cerró el torneo con un gran triunfo ante Independiente
Rosario.- Rosario Central tuvo un solo problema: falló en la definición. Así y todo, le alcanzó para convertir dos goles, jugar bien, llevarse una ovación de su gente y dejar a Independiente fuera de las Copas.
Con dos goles de Marco Ruben, el equipo de Leonardo Astrada cerró bien arriba su participación el torneo Clausura.
Desde el principio, todo fue del canalla. Más allá de alguna insinuación de Sergio Agüero en su despedida del fútbol argentino, Independiente fue un equipo inexpresivo y sin ambición. Enfrente, Central era la expresión contraria. Ricardo Moreira estrelló una pelota en el travesaño, Pablo Vitti no alcanzaba a empujarla, Claudio Velázquez tenía más de una chance clara y a Hernán Encina le fallaba la puntería.
Hasta que, a los 36’, empezó a hacerse justicia: primero no pudo Vitti, Velázquez no alcanzó a eludir la defensa y la pelota le quedó para Marco Ruben, quien terminó en el piso para abrir el marcador en el Gigante de Arroyito.
Desde entonces hasta el entretiempo, lo único que iba a cambiar el escenario era un remate de Agüero, que a los 46’ hizo trabajar por primera vez en el partido a Cristian Alvarez.
Pero la ilusión del Rojo terminó rápido: iban dos minutos del complemento cuando a Marco Ruben le quedó picando la pelota y sacó un derechazo formidable que no pudo detener Oscar Ustari.
Central tuvo más chances que desperdició y, sobre el final, se dedicó a mantener el resultado, que no estuvo en peligro más que en un par de remates de media distancia sin demasiada dirección.
Rosario Central jugó un gran partido y derrotó sin atenuantes a Independiente. Fue por eso que su gente despidió al equipo de Astrada con una ovación, sin disimular la ilusión para lo que pueda deparar el Apertura.
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Fotos
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Marco Ruben enfrenta a Ustari. El delantero canalla marcó los dos goles.
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