|
sábado,
18 de
febrero de
2006 |
Un largo camino para los excedentes hídricos
La tarea de evacuar el excedente hídrico permitirá bajar a la mitad el nivel de La Picasa, con lo cual se recuperará una extensa área productiva. Desde el gobierno de Santa Fe se señaló que el Ministerio de Asuntos Hídricos mantiene en el lugar un equipo compuesto por retroexcavadoras y movilidades que efectuarán los trabajos de mantenimiento necesarios cada vez que el nivel de la laguna baje. Su descarga se produce en la laguna El Chañar, en el distrito de Teodelina, continuando hacia la existente en Junín.
Las tareas de las bombas facilitarán la recuperación de una extensa área productiva de la cuenca de La Picasa y de las superficies extracuenca adyacentes, como los distritos de Christophersen, María Teresa, Diego de Alvear, San Gregorio y Teodelina.
Funcionando las tres bombas inauguradas anteayer, con un régimen de lluvia regular se prevé una baja del nivel de un metro en un año, considerando la configuración actual de la laguna de 23.000 hectáreas. Trabajando a un mismo ritmo, la unidad necesitará cuatro años para bajar el nivel en cinco metros. En las mismas condiciones, sumando el funcionamiento de las obras internas de La Picasa, el tiempo de evacuación descendería a la mitad. La cuenca de La Picasa posee 550.000 hectáreas, de las cuales 210 mil (38%) pertenecen al territorio santafesino, 250 mil (46%) corresponden a Córdoba, y 90 mil (16%) a Buenos Aires. En su configuración histórica el cauce poseía aproximadamente 2.400 hectáreas. En 2001, en su máximo nivel alcanzó una superficie de 40 mil y actualmente posee una superficie de 23 mil.
enviar nota por e-mail
|
|
|