El calzado, un sector que se reconvierte a paso firme

Patricia Martino / La Capital

El calzado es uno de los sectores denominados "sensibles" en la relación comercial con Brasil. Es que la década del 90 golpeó de lleno a las empresas nacionales y Santa Fe no fue una excepción. Se calcula que miles fábricas debieron cerrar sus puertas porque no pudieron hacer frente a un mercado en donde la importación se imponía. A pesar de haber tenido otra chance en 2002, con la llegada de un tipo de cambio competitivo, en el último tiempo las importanciones de Brasil volvieron para preocupar al sector. El año pasado se estableció un cupo de importación de 12 millones de pares pero efectivamente llegaron a la Argentina 13,6 millones de pares brasileños, según datos de la Cámara Argentina de Industriales Proveedores del Calzado.

Las cifras hablan por sí solas. Cuando el país tenía 25 millones de habitantes, se producían 100 millones de pares, es decir unos 3 pares per cápita. Ahora, con casi 40 millones de habitantes ,la media está por debajo de los 2 pares. En 2005 la producción llegó a 70 millones de pares.

Pero la industria nacional de proveedores de calzado no se amedrenta y planea producir este año un 30% más que el año pasado, además de elevar sus exportaciones a 300 millones de pesos.

"La consolidación y el crecimiento del sector calzado viene de la mano de reglas de juego claras", advierte Hugo Alvarez, presidente de la entidad que nuclea a los empresarios, quien argumentó que las asimetrías con Brasil nacen por "el fácil acceso al crédito y los subsidios que tienen los empresarios del vecino país".

Si bien Alvarez entiende que la determinación de cupos de importación es una herramienta útil para equilibrar las diferencias competitivas entre ambos países, advierte que la implementación del Mecanismo de Adaptación Competitiva (MAC) es una buena alternativa para saldar las diferencias definitivamente.

"Si queremos reindustrializar al país hay que dejar que los sectores se desarrollen y vuelvan a ser competitivos, no queremos una protección a ultranza ni mantener cautivo al mercado, estamos invirtiendo para crecer y pensamos seguir por ese camino, por eso necesitamos que nos cuiden durante un tiempo", señaló el dirigente.

El dirigente destacó que se trata de un sector de mano de obra intensiva que ocupa a una gran cantidad de la población con baja calificación, hechos que llevan a incorporar personal a bajo costo. Por eso "la industria del calzado es importante para el país".

Por último, Alvarez marcó una diferencia sustancial entre la gestión de Alberto Dumond a cargo de la Secretaría de Industria y la de Miguel Peirano. "Es importante destacar la gestión del actual secretario, sin el cual, no se habrían logrado estos controles. La firmeza demostrada en resguardo del trabajo argentino y su correspondiente efecto en la reindustrialización del país, son premisas fundamentales en este tema tan álgido de la relación con Brasil", enfatizó.

P.M.