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 domingo, 16 de octubre de 2005  
Sin solución en la huelga de hambre en la cárcel
Ayer se cumplió el quinto día de protesta. Denuncian inoperancia del Juzgado de Ejecución Penal

Los 70 internos del pabellón 1 de la Unidad de Detención Nº3, de Zeballos y Riccheri, no retiraron tampoco ayer sus raciones de alimentos. Así que ya son cinco los días en que los internos están en huelga de hambre como protesta por la "lentitud e inoperancia del Juzgado de Ejecución Penal, a cargo de Efraín Lurá. El viernes los delegados del pabellón en conflicto le solicitaron una audiencia para clarificar la situación con el defensor General de Cámara y a los fiscales como con el presidente de la Cámara de Apelaciones en lo Penal.

Los internos fijaron su posición en dos puntos. Dicen estar cansados de tener que recurrir sistemáticamente a las medidas de fuerza para que sus reclamos sean escuchados y que están contemplados en la ley de ejecución penal 24660. Y reclamaron que se activen una decena de pedidos de salidas temporales, que están contemplados en la ley. "En la actualidad 10 internos alojados en dicho pabellón no han obtenido respuesta al pedido oportunamente realizado para ser incorporados al régimen de salidas transitorias, previsto en la mencionada ley a pesar de haber transcurrido varias semanas", dicen los internos en el reclamos encausado por la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC).

Esta es la segunda medida de fuerza que llevan adelante los internos de la cárcel. El 18 de septiembre, 130 reclusos de los pabellones A y B realizaron otra huelga de hambre y denunciaron que la comida era insuficiente y que no se reforzaban las raciones para las personas afectadas de sida. Fue el propio juez Lurá el que en medio de la medida, que se extendió una semana, fue al pabellón 2 para dar fe de que las raciones que recibían los detenidos eran escasas: "Probé la comida. Desde el punto de vista de la calidad era óptima, pero la cantidad no era adecuada para una persona adulta. Era un plato para un nene de 5 años".
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