Los grandes se hunden a manos de los chicos

San Lorenzo y Racing iban ganando pero festejaron Gimnasia e Instituto

Soñaban con la noche de la recuperación. Fue la del hundimiento. Dos de los grandes del fútbol argentino se pierden en la lejanía de la tabla y ni siquiera pudieron revertir su suerte ganando desde el principio. San Lorenzo lo hacía por 2 a 0 en La Plata pero Gimnasia le ganó 3 a 2. El ex Newell's Grabinski apagaba el incendio de Racing en Avellaneda, pero Instituto le puso nafta de nuevo y lo venció 3 a 2.

El equipo de Gustavo Alfaro arrancó el Apertura, y ayer en el bosque platense, como para comerse los chicos crudos. Antes de los 15', Lavezzi y Peirone hacían delirar a los hinchas santos, aprovechando la fragilidad local, sobre todo por el costado izquierdo.

Pero el Grandote Delorte metió dos veces su testa, Gentiletti puso la cuña entre ambos goles empatando el partido antes del descanso, y después Navarro Montoya y el travesaño, ante un disparo de Cardozo sobre la hora, hicieron el resto. San Lorenzo hacía rato estaba con diez y puso vergüenza, y Gimnasia casi aumenta de penal pero igual estiró su racha a 4 triunfos consecutivos.

En Avellaneda, cuando Grabinski marcó de cabeza al inicio del partido, Fernando Quiroz creyó que al fin saldría de zapatero justo ante su ex club que ahora lo odia tanto. Pero quedó clarito que no solucionó los problemas de Racing y ya antes de las dos conquistas de Bergessio, Instituto había hecho méritos.

El gran andar de Arrieta, artífice del tercero de Brandán que definió el pleito, sepultó las esperanzas de Racing, que apenas se alimentaron al final con el descuento de Cabral.

Instituto gozó como nunca, se tomó la venganza más dulce de Quiroz y de la mano de Jorge Theiler empieza a resurgir de sus cenizas. Todo lo contrario de Racing... Y de San Lorenzo.