De alcahuetes

Pablo Llonto cuenta en su libro la increíble saga de la carta apócrifa del capitán holandés Ruud Krol, que un ex periodista de la revista El Gráfico publicó a comienzos del Mundial 78. "Enrique Romero hizo esa carta. Estaba trabajando en la subsede Mendoza y un día llamó a la redacción de El Gráfico para decir que tenía una carta de Krol en inglés. El director era Héctor Vega Onesime y en algún momento dudaron de la autenticidad de la carta, sobre todo en la parte que decía «Querida hija mía: mamá me contó que los otros días lloraste porque algunos amiguitos te dijeron cosas muy feas que pasaban en la Argentina. Pero no es así. Es una mentirita infantil de ellos. Papá está muy bien. Aquí todo es tranquilidad y belleza. Esta no es la Copa del Mundo sino la Copa de la Paz»", recuerda Llonto.

Y lo más llamativo de la historia fue el desenlace: "Romero no lo hizo por plata, era como que competían para ver quién era el más alcahuete con los militares. Cuando la publicaron se armó un lío bárbaro. La embajada de Holanda pidió una reunión a través de la Cancillería y el director de El Gráfico tuvo que disculparse. Krol desmintió la nota en Mendoza, pero la revista jamás publicó una desmentida, así que para los lectores de El Gráfico la carta fue cierta".