El viaje del lector: Uruguay, país vecino

El miércoles 13 de julio de 2005 salimos de Rosario aproximadamente a las 21.30 con destino a Uruguay. Después de varias horas de viaje visitamos la ciudad de Montevideo, fundada por el gobernador y capitán general del Río de la Plata, don Bruno Mauricio Zabala. Su fundación se inscribe entre 1724 y 1726, período en que comenzaron a arribar los primeros pobladores provenientes de Buenos Aires y de las Islas Canarias.

Nos llamó la atención la cantidad de edificios como el palacio Taranco, Museo Histórico Nacional, Bolsa de Comercio, Casa de Gobierno, edificio Independencia, teatro Solís, edificio Centenario y muchos más.

Nos hospedamos a pocos metros de la principal avenida 18 de Julio, zona comercial y bancaria más importante de la capital, rodeada de galerías, boutiques, cines, teatros y discotecas.

Caminando por allí llegamos a la Puerta de la Ciudadela, traza de las murallas en el extremo noroeste de Plaza Independencia y restos de murallas en la esquina de Buenos Aires y Bartolomé Mitre. Por aquí ingresamos a la peatonal Sarandí donde nos deleitamos con las ferias artesanales y grupos de rock que actuaban en vivo hasta altas horas de la noche.

Siguiendo la caminata llegamos hasta la rambla 25 de Agosto, en la zona portuaria, donde ubicamos el Mercado del Puerto, antiguo Mercado de Abasto, mezcla de historia y leyenda. Lugar donde el canillita y el millonario, el gobernante, el director de orquesta, el escritor, la modelo, el aventurero, el profesional, el pintor y muchos otros confluyen buscando el sabor de la historia que no es otro que el del viejo mercado que constituye el centro gastronómico mas típico de la ciudad.

Camino a Punta de Este, en el departamento Maldonado, nos detuvimos en Punta Ballenas, donde Carlos Páez Vilaró construyó "Casa Pueblo". El artista jamás usó un plano para la construcción de ese edificio que cuelga de los acantilados orientados hacia Occidente, que no posee una sola línea recta en su interior. Cada rincón de esta casa -museo-hotel-restaurante- es un homenaje de Páez Vilaró a un ideal, el amor; a un pueblo, los negros; o a una persona, Jorge Luis Borges.

Así llegamos a uno de los balnearios más renombrados de Sudamérica, con playas tan vacías que permiten a uno sentirse dueño absoluto del lugar, rodeado de un mundo verde donde reina la paz, la tranquilidad y el silencio.

Visitamos el circuito céntrico que comienza en Gorlero, la principal avenida del balneario, que en pocas cuadras contiene restaurantes, boutiques, cines. El hotel y casino Conrad es otro atractivo para recorrer.

Detrás del sueño de Francisco Piria llegamos a la ciudad y Otro día visitamos Piriápolis, fundada por Francisco Piria, quien tuvo el propósito claro del construir una ciudad para el turismo. Hoy Piriápolis, ofrece 20 kilómetros de costa recortada donde se esconden y aparecen playas de diferentes características, un magnífico puerto, sierras para hacer y disfrutar de distintos tipos de deportes.

Visitamos el Hotel Colon, construido por Piria para su hijo menor Arturo donde se exponen pinturas y una estufa de leña de granito negro, extraído de las canteras del cerro Pan de Azúcar. Llegando al paseo de La Pasiva observamos la colonia de vacaciones "Dr. Emilio Uribe" donde funcionó el hotel Piriápolis (inaugurado en 1905) y administrado por el propio Piria.

Después de pasar unos días de descanso en tierras uruguayas, regresamos a Santa Teresa.

Mirta Cantón, Inés Grieco

(ganadoras de la semana)

Albatros en la rambla de Punta Carretas.