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 domingo, 10 de julio de 2005  
La madre de las batallas. La esposa de Duhalde exhortó al jefe del Estado a que se deje de mirar al pasado
Chiche peronizó su discurso y descargó munición contra Kirchner
Aseguró que el presidente le pidió declinar su candidatura y acepte pactar, pero en tono desafiante dijo: "Acá estoy"

Hilda Chiche González de Duhalde lanzó ayer su candidatura a senadora por el justicialismo bonaerense con un desafío al presidente Néstor Kirchner y a los ministros que dejaron el duhaldismo para sumarse al Frente para la Victoria, pero evitó responder "agravios" y exhortó a la "paz" y la defensa de las instituciones.

"Hay muchos compañeros que se han pasado al Frente para la Victoria, pero no va a haber agravios. ¡Cómo agraviarlos, si dos de ellos fueron muchos años secretarios privados de mi marido; si hasta una semana antes visitaban mi casa!", enfatizó Chiche Duhalde.

Chiche Duhalde aclaró que no responderá las críticas de la primera dama, la senadora Cristina Fernández de Kirchner, y de los ministros Aníbal y Alberto Fernández, quienes compararon al ex presidente Eduardo Duhalde con el jefe mafioso de la película "El padrino".

En su lanzamiento oficial, durante un acto masivo en los jardines de la histórica quinta 17 de Octubre, de San Vicente, "donde Perón y Evita amasaron sus sueños", Chiche Duhalde prefirió lanzar sus dardos directamente al presidente Kirchner.

Con un discurso moderado y una promesa reiterada por todos los candidatos que integran su lista para competir en las elecciones del 23 de octubre de "acompañar al gobierno hasta el final de su mandato", Chiche Duhalde acusó a Kirchner de pretender ordenarle que se baje de su candidatura.

La dirigente desafió al presidente al afirmar que igual será candidata y cuestionó su política de derechos humanos, por "estar desde hace dos años y medio mirando al pasado".

"El presidente de la Nación prácticamente me ordenó que no fuera candidata, que me bajara, que negociara, y acá estoy; lo hago con el convencimiento de conocer esta maravillosa y difícil provincia, de haberla caminado, de conocer el dolor y los problemas cotidianos de la gente", dijo Chiche.

Después, enfatizó que a la gente "no le preocupa que los políticos nos peleamos como perros y gatos".

Sin embargo, ironizó: "Hemos cometido un pecado imperdonable: nos presentamos a elecciones por el peronismo de la provincia de Buenos Aires".

Luego tuvo que pedir "calma" a los casi cinco mil militantes que la escuchaban en todo el parque, que agitaban banderitas argentinas y gritaban "traidores" a los ex duhaldistas que se pasaron a las filas del kirchnerismo.

Escoltada en el escenario por el candidato que la acompaña en lista, José María Díaz Bancalari, y el primer candidato a diputado nacional, Jorge Villaverde y con su esposo, el ex presidente Eduardo Duhalde, sentado junto a sus tres hijos y a la vicegobernadora Graciela Giannettasio en primera fila, Chiche se permitió "darle un consejo al presidente".

"Quiero darle, si me lo permite señor presidente, un humilde consejo: hace dos años y medio que estamos mirando para atrás; yo le pido al señor presidente que deje el pasado para los historiadores", dijo en una velada crítica a la política de derechos humanos de Kirchner.

En ese marco, Chiche Duhalde se comprometió a "acompañarlo con todas mis fuerzas, hasta el final de su mandato", y aseguró: "Allí estaremos todos los legisladores de esta provincia, intendentes, acompañando y ayudando para que esta Argentina salga adelante".

Sin embargo, la candidata a senadora por el duhaldismo aclaró en su mensaje al jefe del Estado que su acompañamiento será "desde el peronismo de la provincia de Buenos Aires, porque el peronismo no se alquila, no se vende. El peronismo se encamina hacia el triunfo y me van a ver cotidianamente recorriendo los barrios, los pueblos, hablando con la gente".

En una clara estrategia por diferenciar al peronismo bonaerense del kirchnerista Frente para la Victoria, Chiche Duhalde y los demás oradores evitaron mencionar en todo momento a Cristina de Kirchner.

"Nosotros tenemos que ocuparnos de Buenos Aires y de sus problemas porque esta gran provincia está pasando una situación crítica. Lo vemos todos los días, los problemas en la educación, la salud, la seguridad", señaló en lo que anticipó será uno de los ejes de su campaña, que contempla críticas al gobernador Felipe Solá, férreo aliado a Kirchner y considerado "traidor" por las huestes duhaldistas.

Díaz Bancalari, a su turno, aseguró que como presidente del peronismo bonaerense hizo todo lo posible por llegar a un acuerdo con el kirchnerismo, pero "fueron ellos quienes excluyeron toda posibilidad", y convocó a "la tolerancia y la paz".

En ese marco, elogió a Chiche Duhalde como "la mejor candidata a senadora que tienen los bonaerenses", porque, aseguró, "conoce muy bien la provincia y nadie le tiene que estar mostrando por televisión dónde están los más desposeídos", en una velada crítica a Cristina.
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El ex presidente abrazó a Chiche luego del acto de ayer.

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