Sin certeza

El sargento Ernesto Olmedo había sido procesado por ser el policía de civil que, la noche del 26 de julio de 2002, detuvo al amigo de la chica para robarle dinero y un arma, lo que implicó que los dos jóvenes terminaran en la 1ª (ver cuadro dos de la infografía de la página precedente). El juez Ramos lo absolvió porque no se pudo demostrar con certeza que hubiera sido él quien aprehendió a los menores. Pero dejó en claro que lo que sí estaba comprobado que aquellos fueron detenidos en la vía pública y trasladados a la seccional.