Terror en Londres. A más de 48 horas del ataque, había 25 desaparecidos en el subterráneo

No hay todavía muertos identificados

Los rescatistas luchaban por llegar a un vagón destruido por una bomba, a 30 metros bajo tierra

Londres. - Dos días después de los atentados terroristas en Londres, numerosas personas seguían desaparecidas y, según la policía, que no pudo dar un número preciso, pueden pasar aún días antes de que se recuperen todos los cadáveres atrapados bajo tierra cerca de la estación de subterráneo de King's Cross. Según señaló ayer la BBC, 25 personas están desaparecidas, por lo que el número de muertos podría llegar a superar los 70. Ninguno de los 49 muertos oficiales está todavía identificado

Los trabajos de rescate en el túnel cerca de King's Cross se perfilan difíciles. Se encuentra unos 30 metros por debajo de la superficie y es muy estrecho. Los equipos de rescate acceden con muchas dificultades. Los rescatistas trabajan con extrema cautela, ya que existe alto riesgo de derrumbe.

El tren atacado aquí conectaba un barrio, King's Cross, con Russell Square. Esta línea, la Picadilly, es la más profunda de todo el sistema de subterráneos londinense. Además, el túnel es muy estrecho: apenas 15 centímetros separan los laterales del tren de las paredes de hormigón. Este encierro tuvo un efecto letal, ya que la onda expansiva de la bomba no tuvo escapatoria, haciendo que el número de muertos y heridos graves fuera mucho mayor que en el caso de un estallido al aire libre.

Dentro de la galería la temperatura es 14 grados mayor que en la calle. Los responsables del rescate temen especialmente a un derrumbe. "Estamos trabajando de la mejor forma posible. Tenemos a los mejores expertos para que todo se haga de una manera efectiva", aseguró Andy Hayman, integrante del equipo a cargo del operativo.

Entretanto, los heridos en los atentados que siguen internados son 69. De ellos, 15 están en estado crítico.

Hay muchas familias que aún buscan desesperadas a sus seres queridos. Cuelgan fotos, reparten hojas y apelan a los medios de comunicación para saber del destino corrido por sus familiares. Ayer se abrió un centro de atención psicológica para las familias de las víctimas y de los desaparecidos en Westminster.

Un equipo de expertos se encargará de identificar a las víctimas mortales de las cuatro explosiones, informó el investigador de Scotland Yard Jim Dickie. De los 49 muertos oficiales no se ha confirmado hasta el momento la identidad de ninguno. Las autoridades han establecido una morgue en una instalación militar cercana a Londres de la que no se han dado datos.

Los expertos policiales, patólogos y forenses pretenden, con ayuda de las ropas, complementos como anillos y collares, huellas dactilares y ADN averiguar la identidad de las víctimas.

La policía resaltó que el trabajo de recuperación de cadáveres y de pistas "será lento, metódico y meticuloso para asegurarnos de que no se pierden pistas. Este es un trabajo que haremos de forma adecuada y cuidadosa para que haya el mayor respeto para los muertos".


Homenajes espontáneos
Cuando el próximo jueves se cumpla una semana de los atentados, Gran Bretaña guardará dos minutos de silencio en memoria de las víctimas, informó la BBC. Pero sin esperar los homenajes oficiales, la gente de Londres y sus innumerables visitantes ya comenzaron a rendir honores a las víctimas de manera espontánea.

Al gesto, multiplicado por miles, de las personas que depositan flores en cercanías de las estaciones de subterráneo o donde estalló el ómnibus de dos pisos, ayer se sumaron actos no organizados en los que se recordó a las víctimas y repudió el terrorismo. La más importante de estas conmemoraciones espontáneas se hizo en cercanías de King's Cross, a metros de donde los rescatistas luchan por recuperar los cadáveres.

Centenares de personas se reunieron en un parque cercano a King's Cross, incluyendo a muchos ciudadanos islámicos. En un momento alzaron todos sus brazos al aire, en un gesto similar al que estilan hacer los españoles cuando hacen marchas de repudio de los atentados de ETA.