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sábado,
09 de
julio de
2005 |
Arzobispo tucumano dijo que la política perdió credibilidad
Tucumán- El arzobispo tucumano, Luis Héctor Villalba, advirtió hoy en el tradicional Tedéum por el Día de la Independencia que la política en Argentina "está herida por la pérdida de credibilidad".
El arzobispo dijo que el país "se ha olvidado la ley moral que señala lo legítimo y reprueba lo ilegítimo", algo que consideró "un cáncer maligno", y sostuvo que la política "está herida por la pérdida de credibilidad".
El arzobispo tucumano pronunció su homilía en el tradicional Tedéum realizado en la Catedral de la capital tucumana, durante una ceremonia encabezada por el presidente Néstor Kirchner, en el marco de los actos por el Día de la Independencia.
Villalba afirmó que las familias argentinas "están heridas" porque "en muchas de ellas el padre carece de trabajo y de una remuneración digna" y dijo que también está "herida la salud" por una "atención cara y deficiente" y la educación, por "docentes mal pagados y dificultades para la asistencia escolar".
De todos modos, el prelado aseguró que existen "esperanzas" en "las reservas espirituales de nuestro pueblo y en su generosidad", así también "en muchos ciudadanos que quieren alentar la ética y la honestidad y quieren construir una patria mejor".
"La verdadera democracia exige que la moral informe la vida de la Nación", afirmó el prelado, quien indicó que "la congoja y la esperanza son los sentimientos de esta hora de la patria".
Además, sostuvo que se siente "congoja" cuando se constata que "tantos hermanos nuestros no llegan a cubrir las necesidades primarias básicas, como son la alimentación, el agua potable, la vestimenta, la casa, el trabajo, la educación, la salud".
"Durante años he recorrido en visitas pastorales parroquia por parroquia, ciudades, pueblos, colonias y cerros: en todas partes he encontrado este panorama desolador", indicó el prelado.
En este marco, el arzobispo tucumano puso el acento en el desempleo y en la situación de la salud, como así también señaló que "está herida la educación por docentes mal pagados y dificultades para la asistencia escolar".
Además, sostuvo que "está herida nuestra juventud, por una pérdida de esperanza y de posibilidades; está herida la ancianidad desprotegida; está herida nuestra justicia por la pérdida de confianza" y agregó que "está herida la política por la pérdida de credibilidad".
Ante la presencia de Kirchner y del gobernador José Alperovich, el arzobispo recordó que la grandeza de los pueblos se mide principalmente por las fuerzas espirituales y por eso exhortó a que se vuelva a los Mandamientos, que "antes de ser escritos en piedra, fueron grabados por Dios en la conciencia y en el corazón del hombre". (Télam)
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