Cocina: sabores que seducen

Mi querida amiga, el otro día mientras repasaba un libro, reflexionaba (no se sorprenda, a veces no me queda otro remedio pero le prometo no hacerlo muy seguido) sobre qué cocinera no sueña con ser una diosa en la cocina, por supuesto no todos los días, sólo en ocasiones especiales.

La autora la define amorosamente: "Una diosa en la cocina es quien mantiene una relación sensual con los alimentos y se complace en todos y cada uno de los aspectos que conlleva la preparación de una comida, desde elegir la materia prima hasta mezclar ingeniosamente los ingredientes y servirlos con un toque único". Y sin darme cuenta, me encontré preguntándome ¿existe la comida afrodisíaca? La respuesta no se hizo esperar mucho.

No sé si existe una cocina que realmente despierta las pasiones o no (no creo que importe mucho) lo mejor es estar dispuesto a creer, entregarse y disfrutar de ese juego de seducción. Indudablemente que todo ayuda a crear esa magia: la comida, la ambientación, la música, la bebida. Pero no se equivoque mi querida amiga, el ingrediente imprescindible será nuestra predisposición a seducir o dejarnos seducir.

¿Me deja que la ayude un poco? Le sugiero unos tournedos envueltos en panceta ahumada (ya le enseñé a prepararlos), pero ahora le propongo que los acompañe con una guarnición de peras al Merlot (la receta es para seis personas).

Ingredientes:

1 botella de vino Merlot

200 gramos de azúcar

cáscara de 1 limón

1 rama de canela

1 clavo de olor

6 granos de pimienta negra

6 peras firmes

Coloque en una cacerola con agua las peras peladas (manteniendo el cabito), el vino, el azúcar, el limón, la canela, el clavo de olor y la pimienta y lleve a fuego mediano. Al romper el hervor baje el fuego al mínimo y cocine hasta que las note blandas, pero no deshechas, tienen que conservar algo de textura.Retirelas y continúe cocinando el vino para reducir y concentrar los perfumes hasta que quede a punto jarabe. Presente un tournedo y media pera partida al medio bañada con la salsa de vino. Puede agregar una pequeña y cremosa porción de puré para que el plato tenga todas las texturas posibles. ¿Que si funciona? Eso, mi querida amiga, dependerá sólo de usted.