El cazador oculto: "Las chicas sólo quieren divertirse"

Ricardo Luque / Escenario

"Las chicas sólo quieren divertirse", cantaba Cyndi Lauper, con la voz finita, el pelo platinado y cara de no haber dormido en un mes. Eran los 80, una época que los que la vivieron intensamente apenas recuerdan. Pero los excesos de aquellos viejos buenos tiempos no impidieron que la pequeñita y eléctrica cantante de Brooklyn tuviera razón. Tanta que hoy, en plena edad de oro del "girl power", sus palabras suenan premonitorias. Sí, aunque cueste aceptarlo, hoy las chicas quieren divertirse, más que nada en el mundo, y por eso esperan ansiosas la gran noche. ¿Cuál? La del Martín Fierro del interior, que es como el de Buenos Aires, pero sin Nancy Duplaá, Leticia Brédice y mucho menos Mirtha Legrand, , aunque, por supuesto, con el mismo espíritu festivo. Si no pasen y vean la eterna sonrisa de New Jersey que Omar Maneh, el alma mater del evento, tiene dibujada en el rostro desde que consiguió traer la fiesta a Rosario y que deja ver, en toda su esplendorosa magnitud, el excelente trabajo de su odontólogo de cabecera. Y, hay que decirlo, no es el único contento. Las más entusiasmada son las chicas que, tocadas por la varita mágica, aspiran al fierro. Cómo será de grande su alegría que no paran de hacer planes para la velada. Gachi Santone, que sueña acariciar el cielo con su "Locos por la radio", extremó al máximo la dieta. ¿Para qué, si está delgadísima? Quizás quiere desaparecer, hacerse invisible y así poder jugar el juego que mejor juega y que más le gusta, sin tener que rendirle cuentas a nadie. Analía Bocacci, la blonda locutora de "De 12 a 14", está en una encrucijada. Adicta al quirófano, sueña con estrenar estética para la fiesta, pero no sabe qué más operarse y la ansiedad le carcome las entrañas. La que no tiene dudas es Susana Tealdi, la sesuda conductora de "Bases", quien invertirá sus ahorros en comparar una buena dotación de spray para tratar de mantener a raya, cuanto más no sea por un rato, a su rebelde y ensortijada cabellera. No sea que a medianoche termine con la cabeza en llamas. Más reposada pero no menos entusiasta, Carina Godoy, la conductora de "Popgrama", será fiel a sus instintos y, por más que se lo rueguen, no cerrará sus labios carnosos (trabajar en radio le impide lucirlos cómo debería, pero son igualitos a los de Angelina Jolie) por nada del mundo. Nada.