La sombra del conflicto se asoma sobre el sistema

El municipio no daría créditos al transporte para pagar sueldos

El auxilio financiero sólo llegaría si la Nación fija pautas claras en los subsidios. El lunes será un día clave

El transporte local podría ingresar el lunes en un terreno por demás de conflictivo si el gobierno nacional no fija pautas claras sobre los alcances de los subsidios que se otorgaron anteayer. Es que en la Municipalidad no saben a ciencia cierta en cuánto se incrementaron esos fondos y si finalmente se rebajará el precio del gasoil para el sector. "Si esto no se aclara, entonces no tenemos certeza de nada y no podemos, por intermedio del Banco Municipal, otorgar un anticipo a las empresas para que le paguen a los choferes", indicó ayer la secretaria de Servicios Públicos, Clara García. Ese anticipo es fundamental para que los empresarios abonen, antes del martes, el salario de sus empleados, quienes lograron un incremento a nivel nacional. Por ahora todo es incierto, las definiciones no llegan y la sombra de un inminente conflicto se asoma sobre el sistema de transporte de la ciudad.

"La verdad, no hay nada nuevo", admitió ayer la secretaria de Servicios Públicos, quien por estas horas vive pendiente de las noticias que deberían llegar desde la Secretaría de Transporte de la Nación.

Si bien el esperado decreto presidencial de subsidios al transporte llegó el jueves después de largos días de espera, el texto dejó a los funcionarios rosarinos con más dudas que certezas.

Así, la letra chica de ese paper establece que sólo habrá hasta un 15% de aumentos en subsidios nacionales a los colectivos y no brinda precisiones en cuanto a una rebaja en el precio diferencial del gasoil para el sector, que hoy cuesta 82 centavos por litro y se pretendía reducirlo a 42 centavos.

"Realmente no sabemos nada y en Buenos Aires no nos atienden", admitió ayer García para luego precisar que "se desconoce en cuánto se van a aumentar los subsidios en el interior del país". En tal sentido, explicó que el decreto dice "hasta un 15% y no da más precisiones. Tampoco sabemos nada sobre a qué precio se fijará el gasoil para el sector", remarcó.

Así, y si el lunes no se aclara este panorama, la funcionaria admitió que "no será posible otorgar un anticipo a las empresas para que paguen los salarios de sus choferes".

A renglón seguido, explicó que "los subsidios al transporte son girados por el gobierno nacional el día 5 de cada mes para Capital Federal y Gran Buenos Aires, y el 20 para el interior del país. Lo que se analizó en Rosario -continuó García- es dar un adelanto de esos subsidios a los empresarios, vía préstamos del Banco Municipal, para que puedan antes del martes pagar los salarios con el aumento acordado por los choferes a nivel nacional".


Una estrategia que tambalea
En teoría, la estrategia del municipio para evitar un conflicto estaba bien diagramada, pero las indefiniciones del decreto presidencial podrían desmantelarla por completo.

"Si el lunes no hay definiciones, el Banco no puede dar un adelanto sin saber en realidad qué dinero van a mandar en carácter de subsidios", admitió García.

Así, el anunciado préstamo a los empresarios corre riesgo de desaparecer y nadie se atrevió ayer a decir qué pasará si se llega a esa instancia. "Prefiero pensar que el lunes el gobierno nacional dará definiciones claras sobre el subsidio y no tendremos que enfrentar ningún tipo de conflicto", indicó García.

Desde el lado empresario, en tanto, ayer prefirieron guardar silencio y esperar qué sucederá el lunes. El mismo silencio envuelve al gremio que nuclea a los choferes (UTA), donde los delegados adelantaron que "no habrá ninguna definición hasta el día de cobro de salarios. Hay que esperar para ver si se depositan los sueldos con aumentos, después se verá", se limitaron a decir.

Por ahora no hay definiciones, los tiempos se acortan y lo que reina es la quietud. Un silencio que en la Secretaría de Servicios Públicos esperan no se transforme en la calma que precede a la tempestad.

El martes deben pagarse los slarios y aún no se sabe de dónde saldrá el dinero.