|
domingo,
24 de
abril de
2005 |
Puro corazón
Sin jugar bien, Los Pumas ganaron fácil
El partido ante Japón se presentó para Los Pumas como una muy buena oportunidad para ver en acción a muchas jugadores que en el plano local vienen pidiendo pista. Y si la ocasión era óptima para probar, fue porque el conjunto nipón no se presentaba como un rival complicado. No obstante Los Pumas debían superar ese examen, por más fácil que fuera. Y así lo hicieron: no desaprovecharon la chance y en la cancha del Buenos Aires Cricket & Rugby Club, ante unas 5.000 personas, se impusieron 68 a 36.
Más allá de lo abultado del marcador, Los Pumas no cumplieron una buena actuación fundamentalmente porque sintieron mucho la falta de ensamble al ser un equipo nuevo y encima sin competencia.
Las imprecisiones fueron protagonistas excluyentes, sobre todo en los primeros minutos del partido, cuando los dos equipos se equivocaron mucho por igual en el manejo y no lograban acomodarse en el campo de juego. La única diferencia entre unos y otros fue que Los Pumas tuvieron la iniciativa y jugaron con decisión en el campo japonés, sobre todo en los primeros quince minutos.
Después del cuarto de hora, las cosas empezaron a cambiar y el equipo de Hagimoto logró emparejar la balanza en un partido muy desordenado, que en el primer tiempo se pareció más a uno de básquet que de rugby, ya que al avance de uno le sucedía una réplica del otro. Tanto es así que a los 23' Los Pumas se imponían apenas por tres puntos de diferencia (18-15).
Quizás lo que ayer más llamó la atención en Los Pumas en el primer período fue la falta de claridad en el manejo y en la definición, ya que si hubiesen sabido aprovechar los errores que cometió su rival, sensiblemente inferior, la historia hubiera sido otra.
Lo mejor, al final
El segundo tiempo fue otra cosa, porque a su dominio Los Pumas le sumaron definición. Paralelamente, el conjunto oriental sintió el esfuerzo en ese complemento y fueron barridos por los argentinos que, a medida que pasaba el tiempo iban ganando en confianza y dejando sus huellas, por más cambios que realizaron.
Lo mejor de los dirigidos por Marcelo Loffreda y Daniel Baetti se vio en la recta final del cotejo, cuando con los tries del platense Matías Albina, Federico Higgs y el try penal en apenas 10 minutos redondearon una victoria tan contundente como inobjetable.
enviar nota por e-mail
|
|
|