Piden en Casilda un colegio para chicos hipoacúsicos

Gustavo Orellano / La Capital

Casilda.- El Centro de Integración para Niños Hipoacúsicos de Casilda (Cinhca) gestiona la creación de una escuela especial para sordos al fin de cubrir la creciente demanda de niños con problemas auditivos tanto de esta ciudad como de su zona de influencia. El pedido fue presentado ante la supervisora de escuelas especiales de la Región VII de Educación, con sede en Venado Tuerto, Nélida de Ruiz, aunque su aprobación o rechazo dependerá de la determinación que tome el gobierno provincial una vez analizada la iniciativa.

El reclamo cuenta con la adhesión del Concejo casildense a través de un proyecto de declaración que fue impulsado por el radical Juan José Sarasola y sancionado en la última sesión pública.

El Cinhca fue fundado en 1990 por la inquietud de un grupo de padres que tiene hijos hipoacúsicos. Pero el centro funciona únicamente los lunes y miércoles en dependencias del hospital San Carlos debido a cuestiones edilicias y presupuestarias, y sólo recibe un subsidio municipal de 300 pesos mensuales. La entidad está a cargo de un equipo de profesionales -una docente en educación especial para sordos, una psicóloga y una fonoudióloga-, que brinda atención a dieciséis hipoacúsicos.

Si bien su función contribuyó a la integración de los alumnos con capacidades diferentes al sistema educativo común "es indispensable la formación de una escuela especial para afianzar estos vínculos", explicó a La Capital la responsable del Cinhca, la fonoudióloga María Andrich. La profesional además sostuvo que "también implicaría una comodidad para los padres que diariamente tienen que viajar a Rosario para que sus hijos reciban educación especializada, lo cual resulta un gran desgaste".

Según un relevamiento realizado por el Cinhca hay varios chicos en la zona que necesitan contención. El estudio comprendió a Casilda, Pujato, Los Molinos, Sanford, Arequito, Los Nogales, San José de la Esquina, Arteaga, Fuentes y Bigand. "Algunos de los niños hipoacúsicos detectados van a escuelas comunes, pero otros, por diferentes razones, no concurren a ningún lugar, lo cual justifica la creación de una escuela para sordos", aseguró Andrich.


Muchos casos
De prosperar la iniciativa el centro seguirá en funcionamiento ya que también, a pesar de lo que indique su sigla, está destinado a hipoacúsicos adultos, mientras que la escuela que se pretende crear sólo comprenderá a chicos en edad escolar. "Los casos son muchos y seguramente si se abre el colegio aparecerán más", explicó Andrich, aunque aclaró que hay diferentes modalidades para encarar la enseñanza y la integración. "Hay chicos hipoacúsicos que pueden acceder a la escuela común, otros necesitan de una matrícula compartida o, por su complejidad, sólo pueden concurrir a una escuela para sordos".

La Municipalidad estaría dispuesta a conseguir el edificio donde funcionaría la escuela, según aseguró Andrich, quien confía en el éxito de las gestiones que se están realizando en tal sentido.

Para el Concejo casildense este proyecto permitirá "realizar un trabajo diario con los chicos hipoacúsicos, promoviendo la integración entre las instituciones educativas, apoyo, orientación y fomentar la inserción laboral, entre otros actividades".