Año CXXXVII Nº 48606
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Salud 15/12
Autos 15/12
Turismo 12/12
Mujer 12/12
Economía 12/12
Señales 12/12

contacto
servicios
Institucional

 domingo, 19 de diciembre de 2004  
Volver al cole. La familia de una nena de Arroyo Seco requiere una respuesta de las autoridades educativas
Trinidad tiene 6 años, era sorda y ahora reclama su derecho a estudiar

Osvaldo Flores / La Capital

Arroyo Seco.- Trinidad Santana es sorda de nacimiento pero hace poco más de un año un implante coclear le devolvió completamente la audición. Ahora tiene 6 años, terminó de cursar el nivel inicial y quiere ingresar a primer año de EGB. Pero las escuelas no la aceptan entre sus alumnos, porque todavía presenta dificultades en el habla y necesita de una maestra integradora.

Desde octubre, su familia peregrinó sin éxito por varios establecimientos escolares públicos y privados de Arroyo Seco y la región. Por eso ahora acudieron ante el Ministerio de Educación, para pedir que les digan "a qué escuela tiene que ir a estudiar Trinidad".

La pequeña, una gordita hiperactiva que toma clases de patín, aerobic, dibujo y natación, cursó su jardín de infantes y nivel inicial en la escuela privada Nº 1340 Niño Jesús. Su libreta de calificaciones muestra que todos los objetivos escolares fueron alcanzados pero igualmente no podrá continuar cursando con sus compañeros.

"En esta escuela nos propusieron que Trinidad haga una integración social, es decir que podían aceptarla sólo un par de horas semanales en alguna clase especial, porque no tiene adquirido el lenguaje. Fuimos entonces a una escuela especial, pero allí nos dijeron de la inconveniencia de que una niña completamente normal estuviera con chicos que presentan patologías", explicó la madre de la niña, Carina Isnardi.

"Tampoco nos sirvió una escuela para sordos en Rosario, porque allí sólo trabajan el lenguaje de señas y Trinidad tiene su capacidad auditiva plena. Lo mismo nos ocurrió con una institución similar de Villa Gobernador Gálvez. Antes pasamos por todas las escuelas públicas y privadas de Arroyo Seco y Fighiera, pero sin éxito", añadió.

Días pasados, Carina intentó hablar con una supervisora de nivel primario de Enseñanza Privada del Ministerio de Educación. La funcionaria no se encontraba en el lugar, así que con la nota que presentó le iniciaron un expediente y le dijeron que se comunicarían.

"Le pedimos a usted que nos ayude a decidir adónde Trinidad tendría que hacer su escolaridad", fue el simple y desesperado pedido de Carina a la supervisora. "No queremos imponer a la nena en una escuela, pero como mamá pido lo mejor para ella", expresó en la nota que aún aguarda una respuesta. Mientras Carina explicaba a este cronista en su casa la difícil situación, precedida por los ladridos de su perra Jenny llegó Trinidad. Dijo "hola", "quiero agua", llamó a su hermanito y repitió cada una de las palabras que escuchó de boca de su mamá. Y hasta cambió una sesión de fotos para el diario por un helado.

Trinidad fue intervenida el año pasado en el hospital Garrahan para resolver la hipoacusia bilateral profunda que padecía, ocasionada por una enfermedad que afectó a su madre durante el embarazo. Después de haber sido sometida a innumerables tratamientos, los profesionales que la atendieron llegaron a la conclusión de que la única forma de revertir su sordera era a través de un implante coclear, como realmente ocurrió.

"Nuestro objetivo ahora es que oralice, que adquiera el lenguaje. Lamentablemente estuvo yendo a una fonoaudióloga en Rosario que no supo orientarla, así que perdimos un año. Pero cada día se ve que hace avances en esto de oralizar, sin olvidar que hace sólo un año que comenzó a escuchar", señaló Carina.

"Es hiperactiva, está siempre en movimiento. Trinidad tiene su carácter, no es un angelito -reconoció-, pero no es más ni menos que cualquier chico de su edad que está sano. Es verdad que necesita una maestra integradora y que está en tratamiento profesional en un centro de día, pero salvo por el habla Trini es una nena completamente normal y merece una oportunidad. Sólo eso pedimos: una oportunidad para demostrar que ella puede".
enviar nota por e-mail
contacto
buscador

Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Trinidad ya puede hablar y pide un deseo: encontrar una escuela.

Notas Relacionadas
El recorte del diario

Piden en Casilda un colegio para chicos hipoacúsicos


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados