El actor estrena "Inodoro Pereyra" en la costa atlántica

Miguel Angel Rodríguez: "Inodoro es como Gardel"

El protagonista de "Los Roldán" dijo: "Me gusta tirarme a la pileta, pero sólo si estoy seguro de que hay adentro hay agua"

Pedro Squillaci / La Capital

Tito Roldán se quitó el saco arremangado, se tiñó los claritos, se puso bigotes, vincha, bombacha, y saltó a las tablas convertido en un personaje de historieta. Se trata de Inodoro Pereyra, ese "renegau" de Roberto Fontanarrosa, que este fin de semana inicia su temporada marplatense. Miguel Angel Rodríguez es el responsable de darle vida a este gaucho de las pampas, con el riesgo y desafío que eso significa. "Para mí es como hacer a Gardel", dijo el ex Roberto Sánchez, de "Son amores", que ahora, como siempre, va por más. "Me gusta tirarme a la pileta, pero siempre lo hago si sé que hay agua", admitió.

-¿Por qué elegiste Inodoro Pereyra?

-Hace tiempo que venía estudiando la posibilidad de hacer teatro. Leí seis o siete libros distintos, algunos me gustaron más, otros menos, y después al hablar con Manuel González Gil surgió la posibilidad de hacer este personaje de Fontanarrosa.

-¿Te atrajo lo telúrico o era un personaje que leías habitualmente?

-Me pega el personaje, el humor de Fontanarrosa, que sea una cosa tan popular, con más de treinta años de historia me remueve todo adentro. Es como hacer a Gardel, ¿no? El primer día me devoré el libro y casi me muero. Yo sabía que lo había hecho muy bien el flaco Hugo Varela hace más de ocho años, vi el video de esa puesta y me gustó, pero ahora quiero hacer algo diferente.

-¿Qué tiene de distinto esta obra con respecto a la de Varela?

-Es una versión diferente, se armó un elenco muy bueno, son todos actores del carajo. Y no quiero hablar mal de los que lo hicieron antes, pero buscamos un grupo de actores muy conocidos y que puedan trabajar en un espectáculo para toda la familia. Partiendo de Berugo Carámbula, que hace de relator y genera una interacción con el personaje manejando el afuera; Chichito Viale, que hace de un perro Mendieta muy particular, porque es cordobés (risas) y está muy gracioso, y además maneja mucho las técnicas de mimo. Después está Santiago Ríos, que es la Eulogia y también el sargento; y los chicos de "Videomatch" Sebastián Almada y Pichu Straneo, más Sebastián Borrás.

-¿Lo bueno de interpretar a un personaje conocido no te suma un peso extra al tratarse de un referente de la historieta?

-No es un peso, es un desafío muy grande, pero me encantan los desafíos. Y yo me sigo animando. Tengo esa cosa de que me gusta tirarme a la pileta, pero tiene que haber agua, si la veo vacía no me tiro. Con agua veo cómo me voy defendiendo para nadar diferentes estilos, a lo mejor puedo nadar crol o sino intento mariposa. Esto se va aprendiendo con el correr de los ensayos gracias a la dirección de Manuel González Gil, y sé que Fontanarrosa está a gusto con que yo haga el personaje de Inodoro, lo que para mí es un honor.

-¿Te costó despegarte del personaje de Tito Roldán, teniendo en cuenta que hace tiempo que lo venís haciendo todos los días?

-Es verdad, uno viene con algunos guiños y muecas de un personaje. Pero bueno, ya venía despuntando el vicio, incluso hace poco hice de nuevo a Jorge Lanata en "Videomatch" y me encantó. Pero este personaje es un humor telúrico que me atrapa porque nunca lo hice y porque tiene un montón de variantes. Por ejemplo, por un lado Inodoro se hace el macho pero es un cobarde, es tan gracioso (risas). Pero además, vamos a tratar de hacer una gran obra, queremos que se luzcan todos, y que no recaiga la mochila enorme solamente sobre Inodoro.

-¿Por qué se les ocurrió presentarlo como un circo criollo?

-Lo bautiza así González Gil, quizá sea por la cantidad de variantes que ofrece. Beru (por Carámbula), que lo propuse yo, hace un trabajo excepcional, el perro Mendieta cordobés es divertido, no es tranquilo como otro Mendieta que vi, Santiago es un sargento delicioso, Seba es un soldado trolo, y quizá esas diferentes pinturas de los personajes es lo que hace que González Gil lo vea como un circo criollo.

-¿Con tantos humoristas, en los ensayos pasan letra o cuentan chistes?

-La verdad es que nos divertimos mucho. Y el hecho de que todos los que estamos en el escenario seamos cómicos es muy positivo. Eso hace que agreguemos cosas en los textos permanentemente. Es inevitable. Es como pedirle a Maradona que no tire una rabona si la puede hacer. Ojo, no nos comparamos con Maradona, pero uno tira cosas, después González Gil dice si compra o no compra. Además, hay un valor agregado de este elenco, y es que no hay mujeres.

-¿Eso lo marcás como negativo o positivo?

-Mirá, en este caso, más allá del amor que les tengo a las mujeres, no dejan de ser mujeres. En una parte, Inodoro se refiere a la Eulogia y dice "no es mala, es mucha". Son cuestiones muy graciosas, después Inodoro dice "parecía toda una mujer", y es una pauta de cómo piensa el hombre de una mujer, sin ser machista, ojo. Pero este grupo ya está empezando a manejar sus códigos, que si estuviese una mujer, no serían los mismos. Después de 12 horas diarias de grabar tiras, para mí el ensayo con los muchachos de "Inodoro" es un bálsamo.

-Ya hiciste teatro y televisión, ¿el cine es tu materia pendiente?

-Sí, aunque hice "Tus ojos brillaban", que fue mi primera película y la disfruté mucho. Ahora hay una comedia de Carlos Mentasti, pero no estoy decidido todavía. El tema, además de los libros son los tiempos. De todos modos, presiento que ya me va a llegar el momento del cine.

El actor logró una caracterización total.