Cambios en Santa Fe. En 15 días comenzaría la convocatoria a los partidos

Roberto Rosúa: "Tras la ley de lemas iremos por la reforma constitucional"

Adelantó algunas de las ideas que promueve la Casa Gris

Daniel Leñini / La Capital

El ministro de Gobierno de Santa Fe, Roberto Rosúa, anunció que apenas se derogue la ley de lemas -lo que muy posiblemente ocurriría mañana en el Senado provincial- la administración de Jorge Obeid empezará "el trabajo para la reforma constitucional y la autonomía municipal" de Rosario y Santa Fe.

En diálogo con La Capital, Rosúa se confesó "muy entusiasmado" con la agenda y los temas que prepara el gobierno e indicó que la concreción de la reforma representará "un salto de calidad institucional" para la provincia.

El oficialismo pretende con ella elevar de dos a cuatro años el mandato de los presidentes de comuna y consagrar la reelección por una sola vez del gobernador y vice, entre otras cuestiones. Obeid se autoexcluiría expresamente de esta facultad, que quedaría para los futuros mandatarios.

"La aspiración del gobierno es que la discusión de la ley de lemas termine lo antes posible con la derogación, para luego atender a la reforma. Si el jueves (por mañana) el Senado deroga la ley, en 15 días estamos avanzando y convocando a los partidos con representación parlamentaria", apuntó el ministro.

Esta no será la primera convocatoria de Obeid a los partidos por la misma cuestión: ya lo hizo en su primer mandato (1995-99) y también a principios de este año, cuando la cartera de Rosúa era ocupada por Alberto Gianneschi. En los dos casos el trámite se frustró.

La reforma de la Constitución fue una promesa electoral de Obeid reafirmada en el discurso de asunción ante la Legislatura, en diciembre del 2003. Ese día dijo que la concreción de la misma debía servir para "extender los mandatos de los presidentes comunales de dos a cuatro años, elevar el rango del Consejo de la Magistratura y crear, entre otras instituciones, la Fiscalía Provincial de Investigaciones Administrativas".

Todo ello, además de consagrar la reelección por una vez del gobernador y disponer la autonomía para las dos ciudades de primera categoría (Rosario y Santa Fe), que quedarían habilitadas para dictar sus propias legislaciones, administrar sus impuestos (como la alícuota de la patente automotor) y establecer la política salarial y escalafonaria de sus agentes públicos.

Rosúa destacó que la consulta a los partidos quedará acotada a los temas establecidos por el gobierno y que por ende no se abrirá el abanico para propuestas relativas a otros asuntos. Más allá de algunos detalles, los dos partidos más importantes de la oposición, el radicalismo y el socialismo, apoyan y reclaman la autonomía de los municipios y que los organismos de control, como en este caso la fiscalía, tengan jerarquía y sean reservados a dirigentes de la oposición.

Aún resta definir la jornada en que se hará la elección de convencionales constituyentes. Podría terminar cayendo o bien el mismo día de las legislativas de 2005 (aparentemente en octubre, unificadas en todo el país) o concretarse antes.

Rosúa recalcó que la consulta quedará acotada a los temas establecidos por la Casa Gris.