| sábado, 11 de septiembre de 2004 | Central visita a Lanús en el sur bonaerense desde las 18.20 para la televisión Sin margen para más penurias, los canallas van por su primera victoria en el torneo Apertura Más allá del doble cinco. Por encima del doble ocho. O lo que sea. O como se presente. Central visita a Lanús en el sur del Gran Buenos Aires con todas las urgencias a cuestas. Un punto y un gol en cuatro fechas. Eso porque se borra el antecedente del torneo anterior, lo que profundizaría los números de la crisis futbolística.
Con Vitamina Sánchez tratando de jugar de Polillita Da Silva, a pesar de que a Pablo le sobra jerarquía y pergaminos para jugar de él mismo y punto.
Con el regreso de Raldes, con la ausencia indisimulable de Talamonti. Con Andrés Díaz al lado de Coudet para cubrir las desatenciones tácticas de Chacho. Con Ledesma de cinco y Papa en su lugar original, como le gusta reconocer a don Angel.
Con Vitti como único delantero, aunque la idea es que no ande solo como loco malo allá adelante porque sería fácil presa de la defensa granate.
Pero todo pasa a un segundo plano cuando la realidad golpea a las puertas de un vestuario y se encuentra con un grupo de jugadores repletos de urgencias a los que lo único que les sirve es sumar tres puntos.
Es cierto que a Lanús no le sobra demasiado y que Ramacciotti debería responder con resultados a las contrataciones, pero los granates tienen un margen un poco más amplio que los auriazules.
Zof se sigue esforzando para compensar un equipo descompensado y por darle profundidad a una estructura que hasta aquí sólo dio el presente para achicar la diferencia en la derrota frente a Arsenal en Sarandí.
Esta será una nueva puesta en escena que cuenta con el beneficio de los días con los que contó el entrenador para acomodar las piezas y mejorar a los más complicados en lo físico.
Pero las necesidades no cambiaron. Es más, cada partido que pasa son más pesadas. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Pablo Vitti irá bien de punta. | | |