| domingo, 11 de abril de 2004 | Rugby: los entrenadores analizaron a Rosario en el Argentino Pablo F. Mihal / La Capital Visto de lejos y si se hubieran hecho los deberes antes, el destino final del seleccionado de Rosario en este Campeonato Argentino hubiera sido otro. Lamentablemente, aunque con otros protagonistas, la historia fue la misma. Cuando uno se preguntaba si Rosario estaba para campeón argentino en el fuero más íntimo pensaba que quizás, con un poco de suerte y alguna que otra circunstancia favorable, podría haberlo sido, máxime teniendo en cuenta el nivel de sus rivales. De hecho Mendoza, el campeón, no es mucho más que Rosario pero trabajó durante todo el 2003 para alcanzar esa meta.
La gran pregunta pasa a ser entonces ¿qué se hizo en Rosario desde que terminó el torneo del año pasado? La respuesta es que salvo el partido con Los Pumas, nada. Planteadas así las cosas, como dice el refrán, a llorar a la iglesia.
Horacio Gattarello, Luis Rivas y Nicolás Bossicovich se hicieron cargo del plantel en diciembre de 2003, en medio de una turbulencia política en el seno de la URR. No se sabía quién iba a ser el presidente y el trío tomó el compromiso de conducir técnicamente al seleccionado mayor solamente por el Campeonato Argentino. Ahora que terminó, los tres entrenadores realizaron un análisis de lo ocurrido junto a Ovacion.
"Creo que Rosario fue de menor a mayor, teniendo su pico de rendimiento contra Buenos Aires. Lo que les pedimos a los jugadores fue que jueguen y se vio lo mejor en la cancha de Hindú. Pienso que fue el partido que más intentamos jugar", enfatizó Nicolás Bossicovich en una primera conclusión. "Con Córdoba arrancamos muy atados, después Noreste nos dio facilidades y pudimos hacer algunas cosas aunque con muchas equivocaciones. Mendoza nos sorprendió con cuarenta minutos muy buenos, con Salta volvimos a hacer un buen trabajo y creo que contra Buenos Aires terminamos el proceso bastante bien, muy cercano a lo que le pedíamos", completó el DT mens sana.
Luis Rivas, a su turno, confesó que lo que más le sorprendió fue "que todos los equipos tuvieron como fortaleza el juego a través de la pelota recuperada con los tres de atrás (wines y fullback). Córdoba nos creó problemas desde ahí al igual que Mendoza. De Buenos Aires, por los nombres que tenían, no cabían dudas de que iba a ser así y Salta con sus jugadores de seven demostraron que son peligrosos cuando vienen desde atrás. Ni hablar de Noreste que le hizo tries a todos con ese tipo de pelotas. En ese sentido creo que el rugby se empezó a soltar un poco".
-¿Qué balance hacen de Rosario, más allá de que tuvieron poco tiempo para poder trabajar?
-Se intentó un cambio y hubo poco tiempo para plasmarlo en el juego. Se fue dando de a poco y en el último partido se vio algo del cambio que habíamos propuesto. Queríamos mayor volumen de juego... se habló, se les pidió dos líneas ofensivas, más profundidad, mejor utilización de las pelotas y menos utilización del pie y creo que a lo largo del campeonato se fue dando. Se vio en el segundo tiempo contra Cuyo y en los partidos ante Salta y Buenos Aires donde fue muy buena la utilización post obtención, sobre todo en algunos movimientos. En el juego suelto también hubo intención de juego. Por supuesto que hubiéramos necesitado más partidos para incorporar cosas. (Bossicovich)
-Dio la sensación en los primeros partidos que había una fallas de comunicación entre el cuerpo técnico y los jugadores, o al menos ellos no entendían lo que ustedes les pedían.
-Creo que los jugadores venían con una inercia que fue muy difícil quebrarla. Primero teníamos que ganarnos su confianza y una vez que empezamos a conocerlos, ver las cosas que para nosotros faltaban. Cuando pedimos las cosas, ellos intentaron hacerlas y terminaron haciéndolas más allá del poco tiempo que hubo. (Bossicovich)
-Generalmente hay un proceso que arranca con la comunicación, sigue con el entendimiento y después con la realización y eso demanda un tiempo que hay que recorrerlo con prácticas y partidos. Nosotros lo que hicimos fue hacer cambios en ciertos lugares de la cancha donde había que hacer cosas diferentes a la que estábamos haciendo. No diferentes sustancialmente. En realidad pasaba por la actitud de arriesgar un poco más por el juego en sí mismo. Y eso se fue viendo de a ratos. Recién en el quinto partido se vio la idea del juego que teníamos. También sucedió lo mismo con la defensa donde nosotros no tocamos nada. La comunicación estuvo, lo que pasa es que llevó su tiempo. (Rivas)
-¿Qué fue lo peor de Rosario en este Argentino?
-Creo que tuvimos un primer tiempo fatídico con Mendoza. Realmente eso fue lo peor que hicimos desde la preparación hasta el último partido. (Gattarello)
-¿Les pesó la responsabilidad de ese partido?
-No sé si es así. Nos sorprendieron. Quizás subestimamos algunas facetas de ellos y probablemente nos sorprendieron ahí. No esperábamos que fueran tan ofensivos y que se aparezcan con cualquier pelota a jugar. Esos cuarenta minutos no sólo definieron el partido sino también el campeonato (Gattarello).
-Para mí lo peor fue no haber tenido una fuerte convicción hacia el juego en sí, fundamentalmente al ataque, y también no haber tenido en su principal arma, que era la defensa, una concentración de ochenta minutos. A grandes rasgos fueron las dos debilidades, no obstante ninguna debilidad fue absoluta (Rivas).
-Yo creo que la parte más difícil estuvo en el juego, en la decisión de jugar, de abrir la pelota... (Bossicovich).
-Pero con poco tiempo de trabajo, era lógico que esto podía suceder.
-Sí, pero también pasaron otras cosas. Nosotros empezamos a trabajar con 55 jugadores, a los cuales les dimos un plan de trabajo físico en diciembre. Entre ellos estaban los que habían jugado el Argentino en el 2003, el partido ante Los Pumas y gente que de alguna manera nosotros creíamos que podía estar. De esos 55 terminamos jugando partidos con 40 de ellos y encaramos el Campeonato Argentino con 7 debutantes: Della Vedova, Borrell, Carizza, Gorosito, Morcino, Bianchi y Miralles y no te nombro a Kolonisky que jugó de izquierdo y nosotros lo teníamos de derecho o a Batilana que jugó de segunda línea. Por eso si bien el juego era una faceta a mejorar, este equipo entró con siete jugadores nuevos. Realmente hubo un recambio importante. Fijate que la mitad del equipo titular se renovó por diversos motivos (Gattarello). enviar nota por e-mail | | Fotos | | El seleccionado de Rosario mostró lo mejor ante Buenos Aires. | | |