Cárcel para Soldán y Rímolo por estafas

El conductor fue apresado anoche, justo cuando estaba saliendo al aire por TV

La Justicia ordenó anoche la captura del locutor Silvio Soldán -quien quedó arrestado-, su ex novia Giselle Rímolo y la madre de ésta (quienes, al cierre de esta edición, gestionaban entregarse al juez de la causa), junto a la médica, los dos farmacéuticos y las dos secretarias de la clínica Cidene, donde se habrían concretado medio centenar de estafas y tráfico de medicamentos.

La resolución tomada por el juez de instrucción Mariano Bergés fue consecuencia directa del rechazo de un pedido de eximición de prisión que habían presentado los abogados de Rímolo, luego de que la Cámara del Crimen se expidiera en el caso.

El miércoles último, la sala IV de la Cámara, integrada por Alberto González Palazzo y Edgardo Donna, había parecido aliviar la situación de la falsa médica Rímolo al revocar su procesamiento por los delitos de homicidio simple y asociación ilícita.

Pero, en esa misma resolución, la Cámara ordenó profundizar la investigación por el delito de homicidio simple. Fue por ello que el juez Bergés entendió que quedaba firme su anterior decisión de imponerle la prisión preventiva a la mediática mujer y disponer su arresto por las estafas, indicaron fuentes judiciales.

Bergés ordenó la captura de Rímolo y también la de su madre, Julia Cristina Pano, quien trabajaba en la administración de la clínica que regenteaba en el barrio de Belgrano.

Soldán, hasta ahora, estaba procesado como partícipe secundario de estafa. Pero la Cámara del Crimen lo consideró coautor en cinco casos.

Susana Seccardini, la médica cardióloga que trabajaba en la clínica, quien también había estado presa y se convirtió en otra figura mediática del caso, fue responsabilizada de seis de las estafas.

Los mismos 57 casos de estafas que comprometen a Rímolo se le adjudican a las secretarias de la clínica Yanina Gargano y Mariana Alliano, mientras que a los farmacéuticos Roberto Ruso y Mauricio San Liborio los imputan de tráfico de medicamentos.

El único que quedó exento de la medida fue Fabián Rímolo, hermano de la falsa médica.

La pesadilla de Rímolo y Soldán empezó a fines del 2001, cuando una cámara oculta del programa "Telenoche Investiga" mostró cómo la supuesta doctora atendía a una mujer que quería adelgazar y cómo recibía medicamentos en esa clínica que eran, presuntamente, naturales.

Ni Rímolo tenía título de médica ni los remedios habrían sido tan naturales, según las investigaciones. De hecho, se denunció que Lilian Díaz, una de las pacientes que pasó por el lugar, murió unos meses después de estar tomando la medicación.

Rímolo terminó presa y pasó 171 días en la cárcel de Ezeiza, hasta que la Cámara la excarceló en abril de 2002, pero en marzo del 2003 el juez Bergés le imputó el delito de homicidio simple.

Primero en voz baja y luego a puro grito, Rímolo acusó a su ex pareja, Soldán, de haber sido el dueño de la clínica que ella comandaba, algo que siempre negó el ex conductor de "Grandes Valores del Tango", "Feliz Domingo" y "Soldán Esquina Tango", entre otros éxitos de TV y radio.

Fue en medio de esa pelea que Soldán decidió quitar los 300 mil pesos que había puesto para la fianza de su ex pareja, quien temía por su libertad. (DyN)