Un artículo del Código Civil impide que los no videntes suscriban esas actas

Un muchacho ciego fue impedido de ser testigo en el casamiento de su amigo

Los novios consideraron que "la ley es discriminatoria"

Gabriela Zinna / La Capital

"No queremos que a nadie le vuelva a pasar esto". Esa fue la razón que llevó a Germán Campagna a contar su particular casamiento. El y su novia Melina Cabrera contrajeron matrimonio ayer en el Registro Civil de Juan Manuel de Rosas al 800. Pero lo que -parecía- iba a ser una fiesta terminó en llanto y angustia. Uno de los testigos elegidos por la pareja es ciego. Por esa razón, la funcionaria a cargo del acto impidió que ese joven firmara las actas correspondientes. La decisión adoptada por la empleada provincial se apoya en un artículo del código Civil que así lo establece. "Es una ley discriminatoria", entendieron los contrayentes.

Marcos Gutiérrez tiene 29 años, es docente de música y continúa estudiando esa carrera en la escuela de la Universidad Nacional de Rosario. El muchacho perdió la vista cuando era muy pequeñito.

Marcos y Germán se conocen desde que nacieron. Sus familias son amigas desde hace más de 40 años. "Marcos es como si fuera un hermano para mí", comentó Germán a La Capital, para explicar por qué lo eligió como testigo de su boda.

Claro que a la hora de pensar en quiénes querían que fueran testigos de su matrimonio, Germán y Melina no tuvieron en cuenta que Marcos no ve. "Es una persona normal, como cualquiera y es muy injusto que sea discriminado", apuntó el novio.

Cuando Nelly Leonor Thobokholt -segunda jefa del registro civil de Juan Manuel de Rosas al 800- le comunicó a la pareja que Marcos no podía ser testigo, se desató el desconcierto, la indignación y el llanto. "No podíamos creer que pasara una cosa así", dijo Germán.

Lo sorprendente es que el no vidente ya había estampado su firma en otro acto similar. "El fue el testigo de mi casamiento hace seis años en Villa Hortensia y no hubo ningún inconveniente", recordó Daniela Gutiérrez, hermana del joven al que se le impidió concretar el trámite.

Los novios, Marcos, su novia Silvana y miembros de las distintas familias radicaron ayer la denuncia ante la Defensoría del Pueblo.

"Es inexplicable que ocurra una cosa así", afirmó el defensor del Pueblo, Carlos Bermúdez. En tanto, la directora de esa repartición, María Bressa, quien se ocupó personalmente del caso, adelantó a La Capital que el martes próximo presentarán un pedido de informes por escrito a la Dirección del Registro Civil de la provincia. "Nosotros entendemos que no hay ninguna prohibición para que un no vidente sea testigo de casamiento", agregó Bressa.

Pero este inconveniente no se suscitó por el capricho de una funcionaria del Registro. Thobokholt aplicó el artículo 990 del Código Civil. "No pueden ser testigos en los instrumentos públicos los menores de edad no emancipados, los dementes, los ciegos, los que no tengan domicilio o residencia en el lugar ...", consigna la norma. Hasta no hace mucho también estaban impedidas de ser testigos las mujeres, pero la ley luego fue modificada.

"Es una barbaridad. Es injusto y discriminatorio", recalcó muy indignado Germán, quien consideró que si eso es lo que marca la legislación, "entonces habrá que cambiarla para que nadie más tenga que pasar por esto".

La pareja eligió a otros testigos y se casó. El acto civil terminó después de los entredichos con la funcionaria del Registro. Pero los protagonistas de la historia no podrán superar la amargura "mientras no se cambie esta ley injusta".

"No queremos que nadie vuelva a pasar por esto", dicen Germán y Melina.