| domingo, 21 de diciembre de 2003 | Libia abandona su programa de armas prohibidas y se reintegra a Occidente Washington evalúa el levantamiento de sanciones unilaterales a Trípoli tras el sorpresivo anuncio de Kaddafi Trípoli.- Libia dijo abiertamente ayer que tras décadas siendo considerado un Estado paria deseaba reintegrarse a la comunidad internacional, tras su sorpresivo anuncio de abandonar programas de armas prohibidas. Con la promesa de recompensas por parte de EEUU y Gran Bretaña, Trípoli dio un paso para probar su compromiso con el mundo. Un funcionario de alto rango de Libia se reunió con el jefe del organismo de vigilancia nuclear de la ONU para discutir la propuesta de eliminar programas de armas de destrucción masiva.
A casi 15 años del derribo por sus agentes de un avión de la aerolínea Pan Am sobre el pueblo escocés de Lockerbie, el gobierno de Muammar Kaddafi abrió la posibilidad del retorno de las petroleras estadounidenses a su país con su promesa del viernes de frenar los programas de armas de exterminio. Según Gran Bretaña, Libia estuvo cerca de obtener una bomba atómica.
Negociaciones secretas Algunos funcionarios estadounidenses advirtieron que a pesar de la decisión de Libia -como culminación de negociaciones secretas iniciadas en el inicio de la invasión estadounidense a Irak- todavía es pronto para decir si Washington levantará sus sanciones unilaterales contra el país árabe. Gran Bretaña sugirió que la suerte de Saddam Hussein habría sido diferente si hubiera cooperado con Londres y Washington.
Kaddafi afirmó ayer que el desmantelamiento de su programa de desarrollo de armas de destrucción masiva es "una decisión sabia y un paso valiente". "La decisión merece el apoyo del pueblo libio. Libia será ahora el país que inste a otros, sobre todo en Medio Oriente, Africa y otras naciones del Tercer Mundo, a deshacerse de los programas de armas de destrucción masiva", aseguró. Agregó que su país cumpliría "un papel de primer plano para construir un mundo sin terrorismo, en paz y en desarrollo".
El director del Organismo Internacional de Energía Atómica (Aiea), Mohamed ElBaradei, se reunió ayer en Viena con un funcionario libio de alto rango para discutir la eliminación del programa de armas de destrucción masiva. "ElBaradei se reunió con el secretario de la junta nacional de investigación científica de Libia para discutir el deseo del gobierno libio de eliminar su programa de armas de destrucción masiva", dijo el portavoz del Aiea, Mark Gwozdecky. El presidente estadounidense George W. Bush dijo que esperaba que otros líderes siguieran el ejemplo de Kaddafi.
Por su parte, los críticos europeos de la invasión a Irak dijeron que el anuncio libio mostraba que la diplomacia pacífica podía lograr el desarme. "Libia quiere resolver todos los problemas y queremos concentrarnos en el desarrollo y avance de nuestro país. Este programa de armas no beneficia a nuestro pueblo o país", declaró el canciller libio Mohamed Abderrhmane Chalgam a la televisión Al-Jazeera. "Queremos tener vínculos con EEUU y Gran Bretaña porque eso beneficia a nuestro pueblo", agregó. El anuncio se produjo en vísperas de un nuevo aniversario del atentado contra el vuelo 103 de Pan Am sobre Escocia, en el que perecieron 207 personas. Familiares de las víctimas acogieron positivamente la noticia de que el diálogo había logrado el desarme, en el segundo paso importante de Trípoli este año por reintegrarse a la comunidad internacional.
Libia se libró antes de las sanciones de la ONU tras aceptar su responsabilidad por el atentado de Lockerbie y el pago de miles de millones de dólares de indemnización a los familiares de las víctimas. Washington mantuvo sus sanciones, alegando que Trípoli buscaba armas químicas y biológicas.
El gobierno estadounidense prohíbe la mayoría de las actividades económicas y visitas a Libia con pasaportes estadounidenses a menos que se solicite un permiso. Aviones estadounidenses bombardearon Trípoli en 1986 tras un atentado en un club nocturno de Berlín Occidental frecuentado por soldados estadounidenses. La casa de Kaddafi fue atacada y su hija adoptiva murió.
El ministro de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña, Jack Straw, elogió a Kaddafi, quien fue calificado de "perro loco" por el presidente estadounidense Ronald Reagan, en los 80. "El tiene que ser aplaudido por lo que ha hecho. Creo que es propio de un hombre de estado, y valiente", dijo.
El hijo de Kaddafi, Saif al-Islam, dijo que no había relación entre los sucesos en Irak y las negociaciones libias. "Comenzamos la cooperación incluso antes de la invasión a Irak", declaró a CNN. "Es un acuerdo esencial para Libia, porque, primero que todo, obtendremos accesos a armas defensivas y ya no habrá sanciones a importaciones de armas libias. Obtendremos acceso a conocimientos y tecnología en sectores que fueron prohibidos". (Reuters y DPA) enviar nota por e-mail | | Fotos | | El líder libio Muammar Kaddafi calificó como sabia su decisión de eliminar arsenales. | | |