| domingo, 10 de agosto de 2003 | Primera B Nacional Tiro Federal logró un discreto empate en su debut ante Almagro Elbio Evangeliste / La Capital El día del gran debut en la B Nacional fue apenas discreto para Tiro Federal. No se trató de una tarde que quedará en el recuerdo de muchos ni de una que rápidamente pretenda ser olvidada. Es que en medio de las ganas de formar parte de esa primera vez hubo un partido que rayó lo mediocre, con dos equipos a los que se les hizo casi imposible dar tres pases seguidos. Por eso el reparto de puntos no dibujó muecas de desazón en ninguno de los protagonistas. Los dos se fueron conformes. Almagro por el hecho de haber jugado de visitante y Tiro por su calidad de novato en la categoría. Casi nada. Aunque a decir verdad ambos se aferraron al conformismo por lo poco que mostraron.
Con escasas ideas Tiro comenzó a dar sus primeros pasos en la B Nacional. Tan pocas que los tricolores arrancaron el partido como para crearle más de un dolor de cabeza. Por lo menos así se lo hizo sentir cada vez metió la pelota al área en diagonal, a espaldas de Osella y Chávez. Así Almagro creó sus primeras y casi únicas chances de gol, bien resueltas por un atento Misetich.
A Tiro le costaba mucho manejar la pelota y cuando lo hacía no podía darle un destino cierto. Es que a las malas condiciones del campo de juego se sumó la floja tarde de su gran conductor, el Pescadito Paz. Por eso la variante más potable que apareció fue la escalada de Bono por el carril derecho, precisamente el lado más flaco de la visita.
Pero eran ataques esporádicos. De un lado y del otro. En uno de ellos el que pudo convertir fue Castella, quien entró solo por la izquierda, pero Bernacchia respondió bien mandando la pelota al córner.
Quedó claro que en el descanso ninguno de los dos técnicos pudo, desde sus conceptos, cambiar el rumbo del partido. Al segundo tiempo le faltó más fútbol que al primero, y apenas si se aparecieron algunas jugadas que pudieron terminar en gol. como la que tuvo en los pies Vacaría, quien entró en soledad pero se demoró en patear. La otra en una estupenda volea de Paz luego de que Guerra la bajara de cabeza. Nada más que eso. Es que a esa altura la defensa de Tiro ya mostraba signos de consolidación, lo que no fue un dato menor.
Así comenzaron a desandar los Tigres su recorrido por la segunda categoría del fútbol argentino. En el haber debe anotarse que un equipo de la historia de Almagro no pudo superarlo. En el debe, que Tiro estuvo lejos de su fútbol y que hay muchas cosas para mejorar. Pero esto recién empieza y enfrente se observa un camino largo por recorrer. Lo de ayer sólo sirvió para matar los nervios del debut.
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