Año CXXXVI
 Nº 49.850
Rosario,
viernes  23 de
mayo de 2003
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Catástrofe. Reclaman mejorar las condiciones en los centros de evacuados
El agua se fue, quedan los problemas
El gobierno insiste en que la situación está controlada, pero no deja de preocupar la leptospirosis y la salud mental

Aunque inestable, el clima no fue un obstáculo para retirar la totalidad del agua que aún se encontraba en algunas viviendas afectadas por la inundación que devastó Santa Fe, con excepción de algunos ranchos en el extremo de Santa Rosa de Lima. Sin embargo, hay otros problemas que se acentúan: un preocupante aumento de casos de leptospirosis y hepatitis en centros de evacuados -las autoridades sanitarias insisten en que la situación está controlada- y las precarias condiciones de habitabilidad y convivencia en estos lugares. En tanto, el gobierno decidió el masivo traslado de los más de 7.000 evacuados en escuelas a otros centros, para que las clases se reanuden el 2 de junio (ver aparte).
Estos evacuados serán reubicados en galpones y pabellones acondicionados a tal efecto, en los cuales se establecieron divisorios y boxes para facilitar la convivencia. Es que con los días comenzaron a recrudecer hechos de violencia, sobre todo en los lugares con más evacuados. El titular del comité de crisis, Carlos Carranza, admitió que en los galpones y pabellones reacondicionados "los evacuados podrán permanecer durante meses", una forma de confirmar que muchas viviendas no podrán recuperarse. La semana próxima se hará un censo "casa por casa" para determinar fehacientemente quiénes retornaron y asegurarles la asistencia.
La situación de las casi 40 mil personas que aún no retornaron a sus hogares sigue siendo delicada. Por el lado de los aproximadamente 21 mil autoevacuados, la titular provincial de Promoción Comunitaria, Celia Arena, reconoció que sigue siendo inadecuada la distribución de alimentos y anunció que se estudia ampliar el número de bocas de expendio para hacerla más efectiva.
Por su parte, la organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) sostuvo que hay "3.000 evacuados alojados en sitios que no reúnen las condiciones mínimas de habitabilidad", por lo que consideró "prioritario realojar" a esas personas. "Es urgente planificar soluciones de refugio transitorio digno para los evacuados y personas que han perdido su casa, más aún cuando el invierno es inminente y las temperaturas bajan", dijo el coordinador de MSF Argentina, Rafael Sotoca.
En un tono similar se expresó el arzobispo, monseñor José María Arancedo, quien pidió "acelerar los pasos para encontrar soluciones" a los inundados y que las autoridades armen "un cronograma medianamente claro, previsible, para dar respuesta a la gente, porque hay cierta incertidumbre".
En cuanto al campamento de carpas del barrio La Florida que aloja a 400 evacuados, Carranza dijo que no será levantado "porque la mayoría quiere permanecer" allí. El ministro consideró que como el regreso de la mayoría de los evacuados a sus hogares se está haciendo de manera masiva, es factible pensar "en un proceso mucho más rápido de normalización y de restablecimiento funcional de la ciudad", que se acentuará en la medida que mejoren las condiciones climáticas.
El subsecretario de Salud provincial, Daniel Tardivo, afirmó ayer que aunque persiste el estado de riesgo sanitario en Santa Fe y distritos aledaños, la situación "sigue controlada" y que los casos de hepatitis detectados (73 al cierre de esta edición) "no superan la media habitual" de los últimos meses. Respecto de la leptospirosis, manifestó que 26 casos están confirmados mientras que a otros 70 los calificó de "sospechosos" (dos pacientes están "delicados", internados en terapia intensiva).
Tardivo también reiteró sus advertencias sobre los problemas de convivencia en los centros de evacuados como el predio ferial o la estación del ferrocarril, donde ya hubo -entre otras cosas alarmantes- casos de violencia sobre niños. El funcionario destacó la importancia de la atención que estos casos merecen para que la salud mental no se convierta "en un problema epidemiológico".
En tanto, la coordinadora de la Unidad de Búsqueda de Personas, Raquel Sandoz, dijo que a tres semanas del inicio de la catástrofe quedan 20 personas desaparecidas ya que tras 341 llamados recibidos por el organismo se localizó a 321 personas.
Carranza arrojó un dato alentador sobre otro de los problemas acuciantes de la emergencia como es la recolección de la basura, que se acumula provisoriamente durante el día en la avenida de circunvalación oeste antes de llevarla por la noche al relleno sanitario. El ministro dijo que se incrementó el retiro de los residuos sólidos de las zonas donde llegó el agua, llevándose el promedio de mil toneladas diarias a 1.300.
En otro orden, las fuerzas federales que se encuentran en Santa Fe permanecerán "durante un período prolongado" para dar mayor seguridad a la población, según anunció Carranza. Vale decir que el presidente electo Néstor Kirchner mantendrá el compromiso de Eduardo Duhalde de apoyar en este sentido al gobierno de Carlos Reutemann.



Los evacuados esperan que los reubiquen en otros sitios.
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