A esta altura, no quedan muchas dudas sobre la importancia de la innovación, pero en la Argentina aún no se advierten políticas y estrategias claras sobre ese área, sino más bien planes e intentos públicos o privados bastante heterogéneos y con dispares resultados, y Santa Fe no es la excepción.
"Cluster" es la palabra que aparece repetidamente en el discurso de quienes analizan los procesos de desarrollo innovador. Mauricio Caussi, integrante de la Fundación Centro de Desarrollo Empresarial de Rafaela, aclara que "existen diferentes términos que identifican lo que constituye un fenómeno de aglomeración de empresas en cuyo seno se generan procesos que tienden a aumentar la competitividad de los elementos que los componen, algunos más flexibles al corte sectorial y otros no tanto, y también se encuentra que a un mismo fenómeno se lo llame de distintas maneras".
Términos como "cluster" o "distrito industrial", hacen referencia a "la generación de economías de escala externa a la empresa pero interna al sector o entramado según el corte que se haga", explicó Caussi.
El especialista señaló que "sin entrar en la cuestión técnica teórica de definir un cluster, lo que sin duda hay en la provincia son distintos casos de aglomeraciones de empresas en determinadas micro regiones".
Existen aglomeraciones de empresas pero no hay aún vinculaciones que generen una mejora competitiva. En algunos casos se generan externalidades positivas pero de manera "inconsciente", por lo que el trabajo pasa por "pararnos sobre esta aglomeración y generar procesos que permitan lograr externalidades positivas, pero una cosa es un cluster y otra es una aglomeración".
Esa situación se da, por ejemplo, en el sector del mueble con núcleos en Cañada de Gómez y Esperanza, con el calzado y la indumentaria en Rosario, la maquinaria agrícola en Armstrong y Las Parejas, los tanques y calderas en Esperanza, las autopartes y lácteos en Rafaela, los lácteos también en Sunchales. En Rafaela existe también un sector de metalmecánica especializada en el sector lácteo que está más cerca de la definición de cluster porque avanza más en los cruces intersectoriales. En Santa Fe "el cluster lácteo es un caso a tener en cuenta", mientras que la mayoría de los casos son fenómenos de "aglomeración".
La actitud predominante en los empresarios no es ir hacia el cluster o el distrito industrial, sino a la "asociatividad empresaria, fortalecida no sólo por un vinculo formal sino también informal".
En los últimos años se ve una mayor predisposición de parte de los empresarios a integrarse con "una mayor concientización, fruto de la crisis y de políticas específicas de Estado u ONGs", pero esa "no es una característica distintiva".
Consultado sobre cuál sería el camino que debería seguir la Argentina, Caussi enfatizó que los modelos de otras latitudes "no son replicables, lo que hay que tomar es cómo se adaptan esas experiencias" a la Argentina.
El avance en la conformación de entramados productivos es lento, pero alentador. "Hablar de cluster y de desarrollo local hace 5 ó 6 años era marginal, pero hoy si bien es algo minoritario marca un avance importante, se crean organizaciones, y se mete una cuña entre la micro y la macro, que es la meso economía, con el estudio de las características propias del territorio, las ventajas competitivas y el capital social".
En la provincia, se trabajó bastante en el tema en la segunda mitad de la década del 90. Se creó el programa Municipios Productivos, la Dirección de Desarrollo Regional y Local, se hicieron programas específicos de internacionalización y se crearon secretarías especialmente dedicadas en los municipos. Caussi señaló que en los últimos años, enmarcado en la crisis general y del sector público en particular, se nota "cierto amesetamiento".
El especialista planteó que "la política pyme debe ser una cuestión de Estado, que el presidente trate cada día", pero enfatizó que "estos procesos dependen cada vez más de las instancias locales: la responsabilidad es mayor en el nivel provincial y más en el nivel municipal".
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La Ciudad
