"Los barras se tienen que dejar de joder, que desaparezcan de una vez por todas", sostuvo Cristián Grabinski a la hora de opinar sobre el lamentable incidente del domingo. "Creo que es hora de dejar de matarse por boludeces", agregó con vehemencia el defensor leproso.
"Acá pasa lo de siempre, que uno corre al otro y viceversa, para ver quién tiene más aguante. No hay que buscarle excusas para justificar lo injustificable. Se dice que la situación del país incide en todo esto, pero cuando estábamos en el país medianamente bien también pasaba", expresó.
"La barra está enferma por el fanatismo e intentan hacer notar quién es más fanático que el otro", confesó para enseguida sostener: "No creo que haya un negocio en todo esto".
Grabinski expresó que "la hinchada de Ñubel es la que más alienta, al pedo andan matándose".