Amigo de las declaraciones pulcras y medidas, el entrenador de Racing, Osvaldo Ardiles, rompió ayer el molde al calificar de "lamentable" el arbitraje de Fabián Madorrán y responsabilizar al juez por el empate que Racing obtuvo ante Rosario Central 2 a 2 en el Cilindro de Avellaneda, por la quinta fecha del torneo Clausura. El técnico se fue realmente disgustado con el juez, sobre todo por el penal que les dio a los canallas, por una supuesta infracción a Ubeda en el segundo gol de la visita y por la "facilidad" que tuvo para sacar de su bolsillo la tarjeta amarilla.
"El arbitraje fue lamentable. Me hubiese gustado jugar el partido bajo otras condiciones, porque la tarea del juez nos perjudicó mucho. Es realmente una pena", sostuvo el entrenador de la Academia en los vestuarios una vez finalizado el encuentro.
Ardiles cuestionó severamente el desempeño de Madorrán y entre sus principales equivocaciones mencionó las tarjetas amarillas que les mostró a sus jugadores y el penal que le cobró a Rosario Central, por presunta infracción de Martín Vitali a Luciano Figueroa.
"Estoy seguro de que en la jugada que cobra penal no existe la falta. Además, antes del segundo gol de ellos existe foul a (Claudio) Ubeda y no se cobró", dijo.
A pesar de que el empate privó a Racing de seguir disfrutando de la punta (ahora propiedad exclusiva de Boca Juniors luego de su triunfo frente a San Lorenzo), el entrenador consideró irónicamente que su equipo logró un "buen resultado, porque con este arbitraje deberíamos haber perdido".
Soportaron la presión
Para continuar cargando las tintas hacia la figura del controvertido árbitro, el técnico racinguista destacó que sus jugadores "supieron sobreponerse a la presión" que supuestamente ejercía la proliferación de tarjetas amarillas.
"Estoy contento con lo que hicieron los jugadores, porque se impusieron a la presión que significa que se saquen montones de tarjetas amarillas y ninguno de ellos sea expulsado". La referencia de Ardiles tiene relación directa con el hecho de que seis jugadores de Racing fueron amonestados (Vitali, Ubeda, Bedoya, Bastía, Mirosevic y Orozco) mientras que uno solo de Central (Carbonari) recibió la amarilla, a pocos minutos del final del encuentro. (DyN)