Año CXXXVI
 Nº 49.762
Rosario,
domingo  23 de
febrero de 2003
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Un plan cumplido a medias
El planteo de Veira tuvo orden defensivo pero le faltó profundidad y remate

El Bambino Veira apostó a tener mayor agresividad y manejo de balón en el mediocampo y por momentos lo logró. Con el ingreso de Domizi por derecha en lugar de Ponzio pretendió lograr más ida y vuelta y, sobre todo, mayor orden. Y en parte lo consiguió, porque Newell's defendió bien y tuvo pocos sofocones ante un rival inoperante e inofensivo como Huracán, al que le va a costar mucho mantener la categoría.
El despliegue del Pájaro por derecha fue importante. No tuvo problemas para ganar el duelo con Monsalvo e incluso le alcanzó para visitar en un par de oportunidades el área rival, a punto tal que un cabezazo suyo pegó en el palo y otro fue bien controlado por Ríos.
Domínguez estuvo mejor parado aunque en el primer tiempo le costó más de la cuenta detener a Cabrol, la manija del Globito en su debut con esa camiseta. Y por izquierda Kmet mostró un poco más de lo que había insinuado en el debut, más allá de que el cuerpo técnico quedó muy conforme con su trabajo táctico en aquella oportunidad.
La primera parte del plan, el de quitarle el balón a Huracán, la cumplió a medias. Pero no pudo completarlo porque le faltó lastimar en ofensiva. La salida de Manso lo dejó sin conductor porque el pibe Marino casi nunca le encontró la vuelta al partido. No asumió el rol que dejó el Piojo, perdía más de lo que ganaba con Camejo y el equipo lo extrañaba.
Para colmo de males, Rosales salió lesionado y Newell's se quedó sin el desequilibrio que aportaba por su sector. Silvani y Sacripanti quedaron muy aislados y poco pudieron hacer para asegurar un resultado que le hubiera otorgado una mayor tranquilidad al equipo, permitiéndole mirar el futuro con otro ánimo.
Silvani, que pareció acusar un desgaste prematuro, y Sacripanti casi no tuvieron peso ofensivo. La única jugada en la que lograron encontrarse casi termina en gol del casildense pero la pelota le quedó atrás. El Cuqui se movió con inteligencia de cara al arco pero tuvo poca participación en el circuito ofensivo. Su única chance clara fue en el inicio del partido, luego de que Manso lo dejara de cara al gol, pero la tiró como venía arriba.
El plan que pergeñó Veira para traerse un triunfo de Parque Patricios le salió a medias. Su equipo estuvo bien plantado en defensa pero le faltó profundidad y desequilibrio para rematarlo.


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