-¿Cuándo te vas a retirar?
-Cuando vea que hay diferencias entre los pibes y yo. Muchos me dicen Cristián dejá que te echen, pero no me gustaría terminar de esa forma. A lo mejor el día de mañana me agarra la loca y digo hasta que no me echen no me voy, pero creo que no va a ser así. Por ahora estoy muy bien, motivado, pensando siempre en estar ahí arriba. Tuve la suerte de saber lo que es Newell's ganador, quizás una de las formas de decirle adiós a esto sea terminar en un momento similar a aquel.
-¿Hablás con los más chicos?
-Todo cambió, las generaciones fueron cambiando. Ahora el objetivo es salvarse económicamente lo más rápido posible. Cuando yo empecé la meta era llegar a primera y permanecer, salir campeón. La plata después venía sola. Para conseguir una transferencia tuve que salir campeón dos años seguidos con Newell's y subcampeón de la Libertadores. Y me fui a México, no a Europa. Volví y para irme otra vez salí campeón en el Maracaná con Independiente. A mí me costó siempre. Me acuerdo que al principio iba a Newell's a entrenar con un Opel 78 y naranjado (sic). Ahora los ves con autos 0 km o de un año de antigüedad como mucho, departamento, mujeres... Nosotros éramos más sucios. Teníamos un oído siempre tapado. Las cosas nos entraban pero no salían. Hoy como los tienen limpios, les entra por un lado y les sale por el otro. Por eso muchos van y vuelven de Europa. Firman un contrato por 3 años y a los 6 meses se vuelven total les siguen pagando el sueldo los de allá. Eso es fabuloso, consiguieron su objetivo. Pero yo miro a Domizi. Con mucha o poca plata, pero la gané siempre jugando. No hay que parecer, hay que ser. Me lo inculcaron desde el primer día. Como que nunca cambiaría una camiseta si pierdo, lo haría en el vestuario, pero jamás en la cancha.
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La Ciudad
