Un ómnibus cayó a un barranco desde 100 metros de altura y murieron 47 personas, entre ellas 9 niños. El peor accidente de tránsito que se haya registrado en Argentina ocurrió en la Cuesta del Totoral del departamento Paclín, situado a 70 kilómetros de San Fernando del Valle de Catamarca, en el límite con Tucumán. En el accidente se registraron 26 heridos.
La tragedia se produjo el domingo cerca de las 22, cuando el micro, que había salido inicialmente de la localidad Concepción de la provincia de Tucumán, regresaba luego de que sus pasajeros, todos oriundos de esa ciudad, visitaran el templo de la Virgen del Valle de Catamarca para cumplir una promesa.
Tras recorrer una pronunciada pendiente los frenos sufrieron un desperfecto y esto motivó que el vehículo tomara una incontrolable velocidad y saliera de la ruta nacional 38 para desbarrancarse hacia el selvático precipicio. Los tucumanos, 73 en total, iban en un ómnibus de la empresa Loyola Hermanos, de la localidad Alberdi de esa provincia.
El ómnibus iba sobrecargado de viajeros, ya que al menos veinte viajaban de pie o eran niños que iban en la falda de mayores sentados. La mayoría del contingente eran jubilados del Centro de Jubilados de Concepción, que habían organizado el tour de menos de un día para ir a agradecer el cumplimiento de sus promesas a la Virgen del Valle de Catamarca, muy venerada en la región.
El vicegobernador de Catamarca, Hernán Colombo, confirmó que las víctimas fatales se discriminan entre 33 mujeres y 14 hombres. Además, de los 47 fallecidos, nueve son niños, acotó el funcionario. Los 26 heridos, entre ellos tres menores en grave estado, se encuentran internados distribuidos en el Hospital San Juan Bautista y Hospital de Niños, de Catamarca y el Centro Asistencial de La Merced, en el departamento Paclín.
La jueza actuante, María de los Milagros Vega, dispuso la detención del chofer José Luis Juárez, quien de todos modos quedó internado en grave estado en el Hospital San Juan Bautista.
En tanto, el propietario del transporte, Raúl Oyola, debió ser internado víctima de una crisis nerviosa en una clínica de la localidad tucumana de Alberdi. Algunas versiones que circularon ayer indicaron que la jueza Vega había pedido la captura de Oyola debido a que se sospecha que el ómnibus no contaba con la habilitación correspondiente y se sabe que al momento de la tragedia llevaba unos 20 pasajeros de más, pero la magistrada negó la especie.
A minutos de desbarrancarse el ómnibus, que terminó su caída contra un árbol, se desplegó un gran operativo de rescate, con la participación de la policía y médicos tanto de Catamarca como de Tucumán. La tarea fue ardua ya que, en medio de la oscuridad de la noche, era difícil dar con las víctimas y levantarlas, con la ayuda de grúas, hasta la ruta para poder llevarlas en ambulancia hacia distintos hospitales.
Con la luz del día se reanudaron las tareas de búsqueda, por lo que el número de víctimas, que hasta la medianoche se calculaba en 25, se elevó a casi el doble, haciendo que el accidente quede registrado como el peor en su tipo ocurrido en la Argentina.
Concurrieron al lugar a supervisar las tareas desde el vicegobernador de Catamarca, Hernán Colombo, hasta el subsecretario de Seguridad de Tucumán, y el director de Emergencias de esa provincia, Juan Masaguer. (DyN y Télam)