La protesta piquetera se desarrolló ayer en forma pacífica en cinco sectores de Rosario. Sólo se vivieron momentos de tensión en la zona sur, donde integrantes de la agrupación Barrios de Pie denunciaron "presiones" por parte de la policía. Pasado el mediodía, los manifestantes concentrados en los distintos puntos de la ciudad unieron sus voces para repudiar lo ocurrido en Buenos Aires luego de que la represión policial provocara dos muertes y casi un centenar de heridos. "El reclamo es el de siempre: más trabajo y asistencia alimentaria. Además, repudiamos las amenazas por parte de la Nación y la provincia de impedir a toda costa los cortes", afirmó Julio López, dirigente de Barrios de Pie, organización que instaló su piquete en Oroño y Batlle y Ordóñez, a metros de la autopista Rosario-Buenos Aires, que fue controlado de cerca por un importante despliegue policial. Poco antes de las 13, se les informó a los piqueteros que debían despejar el lugar, lo que crispó los ánimos. En total, fueron tres las advertencias policiales. "Esto lo esperábamos y ahora vamos a evaluar con los compañeros cómo sigue el plan de lucha. Pero igual saldremos a pelear por nuestros derechos", replicó López, quien no ocultó su temor de que todo concluyera en un desalojo por la fuerza. Finalmente, tras una asamblea, los manifestantes abandonaron el lugar. También hubo piquetes en Juan José Paso y Olavarría, ruta 34 y Salvat, Ayolas y Necochea y frente a la Cristalería de Cuyo, por el MTS y el Plenario Obrero y Popular. La protesta, que comenzó a media mañana, fue levantada pasadas las 13.
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