"Como hincha de fútbol me parece que hay un toque de injusticia en esta eliminación. El equipo podía haber empatado con Inglaterra y podía haber ganado perfectamente. Argentina dejó todo lo que tenía y remontó dos situaciones físicas adversas". "Creo que más o menos todos podemos coincidir con las convocatorias y con el planteo táctico. Creo que el equipo podía haber pasado a la ronda siguiente.. Marcelo no es en absoluto exitista. Está en permanente lucha contra la adversidad eventual". "Todos sus planteos tácticos responden a la eventualidad de que le vaya mal, nunca piensa que le va a ir bien. Y creo que este plantel entendió perfectamente este mensaje". Las respuestas de Rafael Bielsa resonaban con tono firme y algo de dolor del otro lado del receptor. Fue el miércoles a la tarde en el programa de Chiche Gelblung por Radio 10. Después fue imposible escucharlo. "Lo primero que haría si estuviera junto a él sería darle un abrazo y seguro que nos pondríamos a hablar de lo efímeras que son las cosas", definió el mayor de los Bielsa. "En realidad hay una sincronía en lo que le pasó a la selección y todo lo que le está pasando al país. Hubiera sido asincrónico que la selección tuviera un buen momento, resonante, con todo lo que le está pasando al país", reflexionó. Ante la sugerencia de que Marcelo no era como él, Rafael fue tajante: "En ese sentido él me lleva ventaja. Me gusta mucho la forma que tiene de vincularse con la prensa. Pero en la intimidad es una persona diferente. Muy comunicativo, risueño. Lo que sucede es que ante la prensa él se siente como en una escribanía. Cuida muchísimo sus respuestas. Trata de no dejar dudas". Para el final quedó una consideración tan futbolera como lapidaria: "Lo de Verón fue miedo escénico".
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