Economistas de distintas vertientes se mostraron ayer escépticos del éxito que pueda tener el recorte en el gasto público anunciado por el gobierno, tanto para alcanzar el déficit cero, como para impulsar la tan ansiada reactivación. Los expertos coincidieron parcialmente en la necesidad de llevar adelante un ajuste, pero evaluaron que es preciso aplicar otras medidas que tiendan a recuperar el consumo y la actividad.
El ex ministro de Economía Alvaro Alsogaray consideró que "es más fácil llegar a Marte que alcanzar al déficit cero". Y opinó que "en las últimas medidas tomadas por (Domingo) Cavallo hay muchas contradicciones".
En ese sentido, indicó que el titular del Palacio de Hacienda "tiene muchas facetas que cambian constantemente", y añadió que Cavallo "no tiene una línea filosófica a largo plazo, sino que es un pragmático que adopta medidas inventadas por él. Es impredecible saber qué va a hacer".
Abel Viglione, el economista jefe de Fiel, afirmó que "de esta crisis se puede salir, aunque no fácilmente", y pronosticó que "el costo de ordenamiento de cuentas públicas será elevado".
Viglione estimó que "hay cierta irresponsabilidad de parte de la clase política que lo lleva a uno a pensar que puede haber una cesación de pagos".
En tanto, Eduardo Curia opinó que "el juego está terminado", y señaló que "seguir con este modelo cada vez cuesta más".
Asimismo, recordó que cuando Cavallo asumió en reemplazo de Ricardo López Murphy, apareció como una alternativa, pero terminó aplicando un ajuste mayor a los 2.000 millones de dólares que propuso su antecesor y fue ampliamente rechazado, razón por la cual tuvo que dejar su cargo.
"Cavallo, quien apareció como el reactivador, la alternativa, terminó siendo un López Murphy a la enésima potencia", sostuvo Curia.
El economista de extracción justicialista indicó que al ministro "los mercados no le creyeron en ningún momento", y afirmó que "la alternativa más gruesa a este camino deflacionario es la devaluación anárquica del mercado".
A su vez, Aldo Ferrer enfatizó que "este modelo fracasó de manera estrepitosa", y evaluó que "esta norma de vincular el nivel del gasto a la recaudación tiene un gran interrogante, porque en condiciones de recesión los ingresos tienden a caer".
Juan Alemann sostuvo que "el ajuste es necesario", pero señaló que "hay que ver cómo se implementa todo esto y qué más se hace". También dijo que "la gente no cree" en el recorte porque el Ejecutivo "no sabe explicarlo".
"Este gobierno es una calamidad. El anterior también, pero este es peor", subrayó Alemann, quien consideró que "el hecho de que el riesgo país esté en 1.000 ó en 1.600 puntos básicos da lo mismo. Igual no tenemos crédito".
Además, aseguró que "así como está el ajuste no es viable", porque "va a ser demasiado duro, habrá cada vez menos ingresos, y esto explota".