Cansado por el intenso calor de la tarde pero con una inocultable satisfacción dibujada en el rostro, Jorge Ribolzi enfrentó el rebelde micrófono de la sala de conferencia de prensa con la seguridad que le dio no sólo el buen triunfo logrado frente a Talleres en la despedida del año, sino el buen bronche para una campaña aceptable desde que asumió al conducción técnica del equipo tras la partida de Rebottaro.
Por eso, el técnico rojinegro trazó un balance positivo de su gestión y aseguró: Quedé conforme con lo hecho por este plantel, que siempre se mostró predispuesto para mejorar. Yo creo que el año que viene será muy bueno, porque este equipo está convencido de que puede ser protagonista.
El Ruso no dudó en afirmar que esta victoria significa mucho para nosotros, porque logramos un triunfo merecido ante un buen equipo como Talleres, que no por nada llegó a esta última fecha con posibilidades, porque la entrega de los jugadores fue total y porque por momentos jugamos un fútbol excelente. La idea era dejar una buena imagen para el futuro y lo logramos, se entusiasmó.
Yo les hice saber a ellos (los jugadores) que quedé muy conforme. Hay mucho por trabajar y no hay que olvidar que no ganamos nada todavía. Simplemente estamos progresando, con el objetivo de apuntar siempre arriba, se explayó. ¿Para qué está Newell's el año próximo? Para ganar y sumar mucho, lo demás vendrá por consecuencia.
A Ribolzi no le gustó que un periodista le preguntara si no le molestaba haber terminado por debajo de Central por diferencia de goles y respondió con un seco no me importa lo que haga Central. Somos Ñuls, eso es lo que cuenta.
El técnico rojinegro explicó también que le preocupan las permanentes molestias que viene padeciendo Manso. Si bien ahora lo saqué por una molestia en el pie, me preocupan los problemas físicos que arrastra. Pero espero que con un buen descanso, un buen tratamiento y un trabajo calculado en la pretemporada, pueda salir adelante.
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La Ciudad
