Abortan contrabando de 50 toneladas de juguetes

Cincuenta toneladas de juguetes con marcas falsificadas cuyo valor asciende a 650 mil dólares fueron secuestradas ayer por personal de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) y la Aduana en un depósito fiscal del puerto de la Capital Federal, indicaron funcionarios.

   El material, que en muchos casos “es riesgoso para la salud de los niños y el medio ambiente” estaba en tres grandes contenedores que habían llegado al puerto de Buenos Aires provenientes de China.

   Los productos falsificados, entre los que también había pilas sin certificación, termos y punteros láser, llevaban la marca Disney.

   También había juegos con la marca Power Rangers.

   Tras la lectura y análisis de la documentación, cruce de información entre el consignatario de la mercadería y el origen y modalidad de la operativa del destinatario, entre otros elementos sospechosos que surgieron de la importación, se detectaron e incautaron los tres contenedores en el depósito Fiscal Tefassa II, ubicado en Benjamín Lavaisse 1056 de Puerto Madero, cercano al Casino flotante.

   La detección del cargamento se logró a través de la aplicación de Matriz de Riesgo Aduanera, que bloqueó y secuestró la mayor operación irregular de juguetes registrados hasta el momento en la Argentina.



Con los jugueteros. También participaron en la operación de control representantes de la Cámara de la Industria del Juguete y los titulares de las marcas invocadas en el cargamento.

   En el caso interviene el Juzgado Nacional en lo Penal Económico a cargo de Jorge Brugo.

   Según los investigadores, el decomiso impidió que estos juguetes falsificados invadieran el mercado comercial local por la proximidad de las fiestas de Navidad, Año Nuevo y Reyes, lo que perjudicaría a la industria nacional y a los comerciantes minoristas.

   Este tipo de mercaderías de importación adquieren mercado inmediato por su “carácter estacional”, ante la proximidad de las fiestas de fin de año. Además, pueden afectar seriamente la salud de los niños y el medio ambiente por sus altos contenidos de plomo.

   Otro caso similar ocurrió en octubre último, cuando la aduana cordobesa secuestró cinco mil juguetes por un valor de 70 mil pesos, el 90 por ciento de origen chino. l (Télam y DyN)